Mientras La Niña se debilita, el calor aumenta en México
Nos dirigimos hacia una fase neutra al debilitarse el fenómeno climático de La Niña, situación que limitará pronósticos confiables, aunado a la “barrera de primavera”. En México se prevé que el calor y el viento domine, sin embargo, las lluvias no tardarán en aparecer.
El informe emitido por el Centro de Predicciones Climáticas (CPC por sus siglas en inglés) el jueves 11 de marzo, indicó pocos cambios del fenómeno de La Niña registrando anomalía de -0.8 a -0.7°C en la región El Niño 3.4 (el dato anterior fue de -0.7°C), manteniéndose intensidad débil y siguiendo con esta tendencia en próximas semanas. En general, las anomalías de temperaturas superficiales del Pacífico ecuatorial van desde +1°C hasta -1°C. Haciendo una comparación con eventos anteriores, la tendencia es que periodos de La Niña puedan dominar en próximos años.
Los ensambles dinámico-estadísticos de pronóstico siguen mostrando incertidumbre en lo que podría ocurrir conforme este año transcurra. En promedio, se observa una fase del El Niño – Oscilación del Sur (ENSO) neutra entre la primavera y el verano con 70% de probabilidad; sin embargo, algunos ensambles apuntan tanto para que El Niño se desarrolle o para reaparezca La Niña hacia el otoño o invierno. Esta condición incierta se debe principalmente a la “barrera de primavera” época en que los modelos tienen una baja habilidad de predecir a más de 3-6 meses causado por la falta de capacidad de simular la interacción océano-atmósfera del Pacífico a finales de cada año, lo cual también afecta al pronóstico meteorológico diario en esta estación del año.
Cada evento del ENSO es único, pero cuando la fase neutra se establece las condiciones del tiempo son más muy inciertas al no observarse patrones meteorológicos bien establecidos, es decir, cualquier evento como calor/frío, lluvia/sequía estaría latente. No obstante, cuando se pase de una fase La Niña a neutro o viceversa, las condiciones tienden a ser un tanto favorables para el incremento de precipitaciones en varios estados de la República Mexicana, al igual que un aumento relativo en incidencia de frentes fríos y regulación de temperaturas, entre días calurosos y otros con ambiente más fresco.
Este escenario sigue siendo probable para finales de marzo o durante abril especialmente en estado del noreste-oriente, alcanzando eventualmente norte, occidente y centro,, pero claro, también debemos tener en mente que las temperaturas serán mayores, tal como lo podríamos experimentar durante esta semana que está por comenzar. Lamentablemente, la sequía sigue avanzando en estados del norte, junto con la escasez de precipitaciones, humedad en bosques, falta de agua y viento fuerte, los incendios forestales y de pastizales pueden aumentar notablemente.
Semana con calor, viento y ¿nevadas?
Varios sistemas de baja presión afectarán el sur de Estados Unidos y norte-centro de México, generando viento muy fuerte en dichas regiones, estimándose rachas de 80-120 km/h principalmente en Chihuahua, Durango, Coahuila, Zacatecas y San Luis Potosí, incluso en zonas montañosas podrían tener mayor intensidad, situación que nuevamente favorecerá tolvaneras importantes, así como propagación de incendios forestales.
Sobre el Golfo de México se desarrollará un evento de Surada prolongado con rachas de 70-100 km/h en zona marítima, así como en montañas de Nuevo León, Tamaulipas, Puebla, Veracruz, Chiapas y Oaxaca propiciando ambiente muy caluroso con extremas de 40-45°C a mitad de semana. A finales de semana podría cruzar un frente frío el norte-oriente del país, junto con su masa de aire frío débil generarán disminución de la intensidad del calor.
Aire frío ingresará el miércoles entre Baja California, Sonora y Chihuahua con probables nevadas aisladas, evento NO asociado a tormenta invernal; las temperaturas pueden caer en sectores altos hasta -10°C. Como se mencionó, existe tendencia para que a finales de mes y durante abril sigan llegando los sistemas frontales que, además de generar descensos térmicos sus masas polares, las lluvias podrían ser mayores en varios estados; su confiabilidad actual ronda el 25-50%, que si logra confirmarse este escenario, sería muy benéfico.