Señales de frío en México para la próxima semana: comportamiento del vórtice polar y oscilaciones
El frío puede llegar a territorio mexicano con intensidad la próxima semana, mientras la circulación atmosférica cambia. Periodo de viento, heladas, algunas lluvias y ambiente frío es probable.
El patrón de circulación troposférica estará cambiando en esta segunda quincena de noviembre, favorable para interacción de oscilaciones y sus respectivos bloqueos atmosféricos que favorezcan un ingreso de aire polar o incluso ártico a territorio mexicano, iniciando este próximo lunes 20.
A continuación, se describirá a grandes rasgos el comportamiento de los factores que indican señales de ingreso de masas muy frías a nuestro país, teniendo en cuenta que puede haber variaciones en su distribución y, por ende, en la intensidad de sus efectos, detallándose en próximas publicaciones.
Circulación general: ¿Qué vigilar en invierno?
Durante el inicio del otoño, el polo norte comienza a recibir menor radiación, cambiando los patrones de presión y temperatura, extendiéndose poco a poco hacia el sur.
Existen diversos sistemas en nuestro hemisferio, pero resaltan la oscilación Ártica, del Atlántico norte, del Pacífico Este, Quasibienal, así como el vórtice polar. A mayor escala, El Niño/La Niña y Madden Julian, describiéndose brevemente.
Oscilación Quasibienal QBO
Se identifica con la variación de los vientos en la parte alta de la región ecuatorial, ondas que perturban la estratósfera (a más de 30 km de altitud), empujando al viento y haciendo que descienda nuevamente con el paso de días/semanas. Sistema complejo que también influye en el comportamiento de Madden-Julian y El Niño/La Niña.
Escucharon hace unos años, ¿“the beast from the east” o “la bestia del este”? Fue un periodo de intenso frío siberiano y grandes nevadas que se presentó en febrero de 2018 en Europa y uno de los principales responsables fue el comportamiento de la QBO, junto con un gran calentamiento estratosférico que perturbó el vórtice polar.
Madden-Julian
Oscilación que se mueve en latitudes tropicales y tiene repercusiones en verano e invierno. En la estación invernal y dependiendo su posición, apoya el ingreso – o no – de masas polares hacia Norteamérica, mientras en verano resalta el fortalecimiento de periodos lluviosos o secos, así como intensificación de ciclones tropicales.
El Niño y La Niña
Términos que han tenido relevancia en los últimos años por sus efectos en territorio mexicano, El Niño se caracteriza por aguas superficiales del Pacífico ecuatorial más calientes de lo normal, siendo más frías con La Niña. Esto interactúan con cambios en la dirección de los vientos de la tropósfera.
En general, los inviernos de El Niño (La Niña) son más fríos y lluviosos de lo normal (más secos y extremosos), mientras los veranos son más secos y calurosos (más húmedos y frescos). Por supuesto, puede interactuar con otros sistemas y alterarse este patrón típico.
Hasta ahora, ya se va viendo los cambios de El Niño en México, con un periodo lluvioso que se presentó el fin de semana pasado y puede repetirse varias veces en próximas semanas, a lo largo del invierno, interactuando efectos de frentes fríos activos y corrientes en chorro con mucha humedad
Vórtice polar elongándose
Sistema más común del invierno en el polo, cuya circulación es ciclónica (en contra de las manecillas del reloj) y que se profundiza desde superficie hasta una altitud de 50 km, ha estado un poco más fuerte de lo normal en los últimos días, encerrando el frío en la región y ayudando el incremento del hielo marino ártico.
Su configuración ha sido mayormente circular, pero esto cambiará desde la semana siguiente, cuando un calentamiento estratosférico se vaya generando en Eurasia, perturbando su circulación provocando que se estire en dirección del Ártico hacia Norteamérica esta segunda quincena de noviembre y parte de diciembre.
Oscilación ártica y del Pacífico Este: frío en fases negativas
Estas se identifican con el comportamiento de las presiones atmosféricas, la ártica se observa en fase negativa cuando es mayor la presión en el Ártico y menor en latitudes medias (Norteamérica), mientras en la del Pacífico se observa esta alta presión en el Golfo de Alaska entrando al Ártico.
Estas se relacionan con la circulación de la corriente en chorro, ese viento fuerte a más de 8 km de altitud que rodea al planeta y puede traernos eventualmente lluvia a nuestro país. Cuando estas oscilaciones se combinan, el flujo del viento se hace netamente del norte, trayéndonos importantes masas frías.
¿Qué puede ocurrir en México la semana entrante?
Todo esto mencionado, estará interactuando en fases negativas favorables para que esta segunda quincena de noviembre con incidencia de periodos fríos en territorio mexicano con lluvias eventuales; debemos tener en mente que no sería raro que algunos días esté caluroso.
El próximo lunes 20 en el transcurso de la tarde, ingresaría un nuevo frente frío impulsado por una masa de aire ártico que se desplazaría rápidamente durante el martes en estados del norte, noreste, occidente (occidente), centro, oriente y sureste desde Chihuahua hasta Quintana Roo, incluye Ciudad de México.
Marcado descenso térmico, fuertes y extensas heladas, “Norte” severo y lluvias dispersas con cencellada en sierras son los posibles efectos, los cuales, se darán detalles puntuales en próximos días, ya que faltan algunos días y variaciones se pueden presentar. Estén pendientes de actualizaciones.