Geoingeniería climática posible solución al calentamiento global
Nuevos estudios proponen como reparar el deterioro ambiental a causa del calentamiento global con geoingeniería climática. Las investigaciones se están llevando con bastante discreción, pero cada vez hay más voces disidentes que abogan por el debate público.
La nuevas investigaciones de geoingeniería climática son un tema controvertido que parece estar estudiando, mientras se pasa por alto en muchos foros políticos y públicos. Aparentemente, está creciendo en la trastienda de Estados Unidos o Europa. Esta “política oculta” se revela parcialmente a principios de año en la cuarta Asamblea del Medio Ambiente de las Naciones Unidas, cuando Suiza propuso una resolución sobre la gobernanza en la geoingeniería. Se está abriendo una “tercera vía” en la lucha contra el calentamiento global, según afirma Sikina Jinnah, profesora de estudios ambientales en la Universidad de California - Santa Cruz.
El estudio publicado por Nature Geoscience, Jinnah y el coautor Simon Nicholson de la American University, advierten de la necesidad de transparencia en este campo de estudio. “Hay que garantizar que el mundo tenga las herramientas para administrar estas potentes tecnologías y prácticas, siempre y cuando se tomen decisiones para usarlas”, apuntan. Hasta hace unos años hablar de la ingeniería climática parecía un despropósito, “una locura” según los autores, pero últimamente estas ideas ya se toman en serio ante el fracaso de los gobiernos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
La propuesta suiza desveló una división entre Estados Unidos y la Unión Europea. Evidenciando un desafío que supone establecer una gobernanza ante las dos estrategias de geoingeniería que están ganando terreno en el ámbito atmosférico: la gestión de la radiación solar y la eliminación de dióxido de carbono, dos prácticas que podrían poner en riesgo el equilibrio del planeta.
¿Qué se quiere conseguir con la gestión de la radiación solar?
Esta estrategia aún no es aplicable, pero implicaría alterar el brillo planetario para reflejar una cantidad muy pequeña de luz solar lejos de la Tierra con tal de crear un efecto de enfriamiento. “La idea es imitar el efecto de una erupción volcánica”, explicó Jinnah. “Muchas personas tienen miedo de su potencial para alterar el planeta, y con razón”. Un equipo de la Universidad de Harvard hace un tiempo anunció su intención de hacer el experimento al aire libre, a una pequeña escala, pero la reacción pública en contra fue rápida y tajante. De momento se ha abortado la misión.
Propuesta latente la eliminación de carbono
La ‘eliminación de carbono’ (CDR) aparece como una opción menos controversial, que se está tratando abiertamente en el ámbito científico. De hecho, algunas organizaciones internacionales abogan por su necesaria puesta en marcha. Esta estrategia incluye opciones ya existentes, como la mejora de los sumideros forestales de carbono y opciones tecnológicamente más lejanas, como la ‘captura directa del aire’.
Los expertos en ingeniería climática dicen que estas prácticas deberían ser complementarias a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. No obstante, la tentación de seguir contaminando podría ser inevitable.