Calentamiento global: favorece un mayor número de olas de calor
De acuerdo con estudios climáticos se han vuelto más frecuentes e intensas las 'olas de calor' debido al cambio climático.
Datos observados arrojan que la temperatura media mundial es alrededor de 1.2 °C más cálida que en la época preindustrial. A medida que nuestro ambiente continúa calentándose, las olas de calor empeoran volviéndose más frecuentes y duraderas en muchas partes del mundo.
En años pasados en los países con una mayor gama de datos atmosféricos registrados y observados, arrojaron análisis donde se pudo dictaminar tanto un aumento generalizado de la temperatura ambiente, tanto la presencia con mayor frecuencia de olas de calor que afectaron a países como Europa, Estados Unidos y China.
Adicionalmente a que las temperaturas superan los 40 °C (104 °F), durante las estaciones de verano y primavera, también los incendios forestales están arrasando bosques en muchas partes del mundo. El calor abrasador es parte de un patrón global de aumento de las temperaturas, atribuido a la actividad antropogénica.
Olas de calor más calientes y frecuentes
El Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC), ha declarado en repetidas ocasiones que las olas de calor serán más calientes y más frecuentes, siendo más evidentes sobre regiones terrestres. Las emisiones de gases de efecto invernadero de las actividades humanas han calentado el planeta en aproximadamente 1.2 °C desde la época preindustrial. Esa línea de base más cálida significa que se pueden alcanzar temperaturas más altas durante los eventos de calor extremo.
"Cada ola de calor que estamos experimentando hoy se ha vuelto más caliente y más frecuente debido al cambio climático", dice Friederike Otto, científica climática del Imperial College London que también dirige la colaboración de investigación de World Weather Attribution.
Pero otras condiciones también afectan las olas de calor. En Europa, la circulación atmosférica es un factor importante. Un estudio en la revista Nature encontró que las olas de calor en Europa han aumentado de tres a cuatro veces más rápido que en otras latitudes medias del norte, como los Estados Unidos. Los autores vincularon esto con los cambios en la corriente en chorro, una corriente de aire rápida de oeste a este en el hemisferio norte.
Se estima que las olas de calor sigan empeorando
Como ya se mencionó en párrafos anteriores que la temperatura media mundial sea alrededor de 1.2 °C más cálida que en la época preindustrial, esta condición favorece eventos extremos atmosféricos y climáticos a que sean más catastróficos e incluso mortíferos.
"En promedio, en tierra, los extremos de calor que habrían ocurrido una vez cada 10 años sin la influencia humana en el clima ahora son tres veces más frecuentes", dice la climatóloga de ETH Zurich, Sonia Seneviratne.
Marcas evidentes del cambio climático
Para averiguar exactamente cuánto afectó el cambio climático a una ola de calor específica, los científicos realizan "estudios de atribución". Desde 2004, se han realizado más de 600 estudios de este tipo para eventos climáticos extremos, incluidos el calor, las inundaciones y la sequía, calculando el papel que jugó el cambio climático en cada uno.
Por ejemplo, los científicos de World Weather Attribution determinaron que una ola de calor récord en Europa occidental en junio de 2019 era 100 veces más probable que no ocurriera en Francia y los Países Bajos, si los humanos no hubieran contaminado y deforestado tanto en los últimos años.