¿Qué es la desertificación y cómo degrada el suelo?

Conforme el valor de las temperaturas a nivel mundial se incrementa, una mayor parte del suelo a nivel global va siendo vulnerable a esta condición. Este proceso de degradación del suelo se encuentra impactando a alrededor del 40 % de las tierras del mundo.

La preocupación en la pérdida del suelo, a nivel global, se centra en el ritmo acelerado de degradación que como humanidad causamos en este estrato. Con el pasar del tiempo y en mayor medida, se incrementa el número de tierras degradadas, que antes eran cultivables, exponiéndolas a ser suelos improductivos.

Las interpretaciones de la definición varían, pero el foco de atención está puesto, principalmente en tierras donde las precipitaciones son escasas, o que se presentan de forma irregular durante el año, asociándose particularmente a tierras de condiciones áridas, semiáridas y subhúmedas.

Dichas extensiones, representan más del 40 por ciento de la superficie terrestre alrededor del mundo. A lo largo de la historia, la degradación del suelo se ha encontrado presente en la vida del planeta. Sin embargo, de acuerdo a la ONU, este ritmo se ha acelerado exponencialmente, superando entre 30 y 35 veces la tasa histórica.

Existen una serie de factores, que inciden para que se presente de esta forma, tales como: la urbanización, minería, agricultura o la ganadería. Durante su realización, estas actividades provocan la eliminación de vegetación, mientras que las pezuñas de los animales impactan el suelo y los cultivos agotan los nutrientes de la tierra.

Aunque la disponibilidad del agua juega un papel importante, las mejores prácticas de aprovechamiento de recursos deberán predominar.

Principalmente impacta en poblaciones más pobres y vulnerables

El riesgo de que se presente la desertificación se ha extendido a diversas zonas alrededor del mundo. Se dice que se encuentra presente en más de 100 países alrededor del mundo, impactando con mayor severidad en naciones pobres y vulnerables. Esto, pues la agricultura de subsistencia es una práctica común. en el tipo de grupo social identificado.

De acuerdo al Atlas Mundial de la Desertificación de la Comisión Europea, se dice que más del 75 % de la superficie terrestre ya se encuentra degradada, así como más del 90 por ciento podría llegar a encontrarse en esa situación para el año 2050.

Avanza aceleradamente

El Centro de investigación de la referida Comisión, descubrió que, anualmente un área de la mitad del tamaño de la Unión Europea, algo así como 4.18 millones de kilómetros cuadrados, se degrada. Continentes como Asia y África, son las porciones más perjudicadas.

A lo largo de la historia, la degradación del suelo se ha encontrado presente en la vida del planeta. Sin embargo, de acuerdo a la ONU, este ritmo se ha acelerado exponencialmente, superando entre 30 y 35 veces la tasa histórica.

Los factores que impulsan la desertificación son diversos, dependiendo de la región y las actividades que ahí se fomenten. Por ejemplo, el uso exagerado de agua para riego agrícola, en las regiones de Uzbekistán y Kazajistán, fue una de las principales razones de que el mar se redujera, dejando un gran desierto salino, donde antes estaba el cuarto lago más grande del mundo.

Posibles soluciones

La Convención de Lucha contra la Desertificación ha promovido La Gran Muralla Verde, iniciativa enfocada en restaurar 100 millones de hectáreas en 20 países de África, hacia el año 2030. En el Norte de China, se sabe, las autoridades gubernamentales están plantando árboles a lo largo de la frontera del Desierto de Gobi, para evitar su expansión.

La tarea de contener la desertificación, así como de llevar a cabo buenas prácticas de cuidado del medio ambiente, debe ser un objetivo común de la sociedad. La tierra es un ser vivo que entre todos, debemos proteger mediante buenos manejos. No hay tiempo que perder.