¿Por qué es blanco el traje que usan los astronautas en el viaje espacial?

En ocasiones, al momento del despegue, los cosmonautas suelen utilizar equipos de diferentes colores, sin embargo, al tener una exploración espacial utilizan siempre el blanco. En este artículo te explico la razón.

El traje espacial, esta diseñado para proteger la vida del astronauta.

Técnica u oficialmente, el traje espacial lleva el nombre de Unidad de Movilidad Extravehicular, y es uno de los elementos más importantes que acompaña a un astronauta en una misión espacial. Incluso, sin exagerar, podría decirse que es una segunda nave espacial, pues ella está equipada y diseñada de tal forma, que puede preservar la vida.

Además, cuenta con todo lo necesario para mantener con seguridad a quien lo porta. Te explico esto, porque recientemente ha llamado la atención general el diseño y color del traje que se empleará para la misión Artemis II, de la NASA, en colores negro y naranja. Y aunque en la presentación se usaron estos, al estar en órbita, los astronautas deben llevar el tradicional y conocido color blanco.

Un detalle muy importante, también radica en que, esta herramienta de trabajo, se diseña buscando la optimización y haciendo en todo momento, ser más asequible la adaptabilidad del astronauta a las condiciones que se encontrará en su campo laboral, el espacio.

Ya te decía, que un traje con el equipamiento y diseño adecuados, puede garantizar la seguridad de quien lo porta, y en gran medida, el éxito de la misión. De ese tamaño es su importancia. Y aunque parezca increíble, el color del traje es un elemento muy importante de seguridad.

Funcionalidad y relevancia

Al atreverse a salir de la nave, ya sea para realizar tareas exploratorias y de mantenimiento, o de exploración e investigación, el traje debe reunir todas las características necesarias para salvaguardar la vida, y garantizar el desarrollo y éxito de cada tarea y misión. Además de que, por obvio que parezca, debe vestir de forma segura.

El equipo, debe aislar la temperatura exterior de la que tiene al interior el cuerpo humano. Además, contará con una reserva de oxígeno, para mantener lo más óptimo y vital posible el ambiente. Por otra parte, estando fuera de la nave, el cuerpo humano necesita mantenerse hidratado, por lo que éste, dispone de una serie de tubos que llevan agua al organismo.

Barrera entre el cuerpo y la radiación

Es requisito, que el color del equipo que usa el cosmonauta, al momento de salir de la nave a realizar cualquier tipo de tarea: mantenimiento, exploración, investigación, etc., sea de color blanco, pues por todos es sabido, que este acciona un efecto reflectante de las radiaciones solares. Si el traje fuera de colores obscuros, sucedería todo lo contrario, absorbiéndolas.

De esa forma, al “atrapar” esta energía, se acumularía de tal forma que pondría en riesgo la integridad y la vida del astronauta. Basándonos en el principio de salvaguarda y protección, se garantiza que la radiación, que es perjudicial y agresiva para la salud y la vida, se mantenga lejos de la piel, y así se evita la exposición a este perjudicial riesgo.

Seguridad en todos los sentidos

En este mismo sentido, al exponerse al espacio, si el traje fuera de un color oscuro, sería menos distinguible. Al ser de color blanco, se puede ubicar con mayor facilidad, y ante cualquier riesgo de distanciamiento involuntario de la nave, el resto de los integrantes de la misión, aseguran su localización con rapidez.

Los trajes que son usados al momento de abordar la nave espacial, así como al momento del despegue son diferentes, porque están diseñados para proteger a la tripulación en caso de que se produjera algún accidente al momento del despegue. Estos, están provistos de una serie de bolsas de aire y sistemas de geolocalización.

Diseño del equipo

Sin embargo, en la antigüedad, eran de color naranja para que fuera fácil ubicarlos a la distancia, en caso de que sucediera un accidente, ya fuera en el agua o en tierra. Recientemente, el equipo consta de múltiples módulos, que son colocados de manera independiente uno de otro: una parte inferior que cubre las piernas y los pies, el casco visor, los brazos y los guantes.

El listado, cierra con el torso rígido. En términos generales, ya colocado todo el equipo, tiene un peso de 150 kilogramos. Si se quisieran realizar tareas terrestres, implicaría todo un esfuerzo y desafío siquiera el poder moverlo. Pero, al encontrarse en el espacio esto se minimiza por efecto de la falta de gravedad, así mejora el desempeño de las actividades, al dejar de sentir la totalidad del peso.


Para concluir, es importante hacer mención que no existe un traje estándar para cada misión, sino que cada diseño se realiza de manera exclusiva para astronauta, adaptado a las tareas espaciales que éste llevará a cabo. Y aunque, el exterior pareciera ser igual para todos, en el interior, cada astronauta dispondrá de un sistema de capas diferente.