Los acantilados más espectaculares de México
Nuestro país, está lleno de espectaculares bellezas naturales. Además de tener especies de flora y fauna endémicas, se cuenta con increíbles cañones y barrancas, haciendo de nuestro país, único en todo el mundo, por su inigualable belleza.
Desde la frontera Norte, hasta la Sur, la República Mexicana está compuesta de paisajes únicos, especies de flora y fauna endémicos, pero también de increíbles barrancas, cañones y acantilados, que confirman la condición de nuestro país: somo el cuerno de la abundancia.
Entiéndase la definición de acantilado, como aquellas paredes que caen de manera vertical, o casi vertical, y cuyo requisito adicional incluye que se encuentre próximo al mar. Estos, se originan por la presencia de cortes y relieves, que son determinados por la presencia del oleaje.
Para los técnicos especialistas en la materia, este es un accidente geográfico, que consiste en una pendiente, o una abrupta vertical. Habitualmente, como se dijo antes, se alude al término cuando están sobre la costa, aunque también pueden entrar en la denominación los que existen en montañas, fallas y orillas de ríos.
Muchos acantilados, conforme a la definición que expresan técnicos en la materia, incluyen cascadas y grutas excavadas en la base. Además, se aclara, no tienen por qué ser exactamente verticales, incluso pueden tener determinada pendiente.
Mide 45 metros de altura
Uno de los sitios icónicos, por muchos conocida y que se ha incluido en diversas películas, es la Quebrada de Acapulco. Se sabe que, esta playa es un destino tradicional para muchos habitantes del Centro del país, por su cercanía con la Ciudad de México.
El primer salto que se realizó, se dice que data de 1945, cuando se “conquistó” esa proeza. Numerosos son los atrevidos que, buscan emprender la aventura: numerosos residentes de la localidad, así como turistas nacionales, así como uno que otro atrevido extranjero.
Habitualmente, es hacia el mediodía y por la tarde, cuando se busca conquistar esta intrépida aventura, atrayendo a importante número de turistas. Para quienes aún no han tenido la oportunidad de conocer, en este destino existen múltiples actividades que se pueden disfrutar, además de una deliciosa gastronomía local.
Entre la selva y el mar color turquesa
Conforme a los guías de turistas e historiadores de la región, se explica que existen múltiples historias, de turistas extranjeros, que se desmayaban al llegar al filo del acantilado de Tulum, en Quintana Roo. El lugar, se encuentra localizado entre la selva y las increíbles aguas color turquesa.
Pero además, el sitio, está acompañado también por “El Castillo”, esta construcción única que, en su momento, sirvió para llevar a cabo ciertos ritos mayas, así como también, se empleó de guía como faro, para los navegantes que buscaban llegar a de forma segura a tierra firme.
El lugar, se encuentra a una distancia aproximada de una hora, si se toma como referencia Playa del Carmen. Y próximo al destino, existe una importante variedad de actividades: acuáticas, de esparcimiento y diversión que se pueden llevar a cabo, además de tener un muy amplio menú gastronómico.
Acantilado costero en Baja California Sur
El sitio, está incluido dentro del catálogo de Áreas Naturales Protegidas. Acá, según comentan diversos aventureros, se suele practicar el senderismo. Conforme a la guía de senderistas, se dice que fue en el año de 1973, cuando la Isla Espíritu Santo fue entregada al Ejido Bonfil.
Este acto, según trasciende, se realizó como una ampliación de su dotación ejidal. Sin embargo, fue en año de 1978 cuando se decretó zona de Protección de Flora y Fauna, junto con todas las islas del Golfo de California. Y en el 2003, previa negociación con organizaciones ejidales, se publicó un decreto expropiatorio.
Se cuenta que, en la zona se puede caminar por sus senderos, siendo esta actividad una experiencia única, que además da la oportunidad de involucrarse en la conservación del sitio. En su documento, existe una serie de normas que hay que atender, para perpetuar su conservación.
Una de las mejores vistas hacia el Popocatépetl
Ixcamatitlán, es un sitio que posee de todo, desde increíbles cabañas y casas para para descansar, así como espacios para practicar ciclismo, montañismo, paseos en lancha, deportes acuáticos, entre otros. En este contexto, se dice que, se tienen también los acantilados más espectaculares con vista al Loago de Valsequillo.
Conforme a lo que relatan expertos aventureros que conocen el lugar, este, es un destino ideal para los amantes de la adrenalina y el deporte extremo. Se piensa, que aquí se encuentran los acantilados más espectaculares que Puebla puede ofrecer.
En ellos, según se refiere, se puede practicar escalada o rappel. Está tan bien ubicado, para quienes habitan en el Centro del país, que se localiza a menos de dos horas de la Ciudad de México. El Lago de Valsequillo, nació de manera artificial, durante los años cuarentas del siglo pasado.
Impresionante flaqueo del río Conchos
Localizado en medio del Desierto Chihuahuense, su nombre lo adopta de un ave que anida de forma recurrente en este único lugar. Se dice que, su recorrido inicia cerca de El Álamo, un pobladito entre la sierra El Pegüis y la sierra Cuchillo Parado.
La imponente maravilla natural, cuenta con 16 kilómetros de largo, así como una profundidad de hasta 350 metros. Sus paredes son calcáreas, totalmente verticales, resguardando en lo profundo de su interior el río Conchos. También, suele practicarse el emocionante rafting.
El río, tiene descensos que hace de su traslado, una intrépida aventura. Además, se dice que, es ideal para practicar el cañonismo. Los que han aprovechado la oportunidad, cuentan que se pueden apreciar algunas pinturas rupestres con formas geométricas, además de poseer tinajas para nadar y cuevas que explorar.