La importancia del pronóstico meteorológico en la decisión de la fecha del desembarco de Normandía
El correcto análisis meteorológico fue clave para decidir el día y la hora del desembarco de Normandía. También se tuvo en cuenta la fase de la Luna y la marea.
El desembarco de Normandía, también conocido como el Día D, fue una operación militar a gran escala planificada meticulosamente por los líderes aliados durante la Segunda Guerra Mundial.
Este hecho marcó un paso crucial para la liberación de Europa occidental del dominio nazi. Su planificación fue en total secreto, para la selección de la fecha del desembarco tuvo un gran peso las condiciones meteorológicas.
Los líderes de Reino Unido, Estados Unidos, Canadá y Francia, encabezados por el general Dwight D. Eisenhower, necesitaban seleccionar una fecha con condiciones favorables para permitir que las tropas desembarcaran con éxito, navegaran y proporcionaran apoyo aéreo y naval adecuado.
Lograr esto implicaba considerar factores como las mareas y las condiciones meteorológicas. Se eligió el 6 de junio de 1944, aunque inicialmente estaban previstas otras fechas.
Un héroe desconocido en el desembarco de Normandía
Está claro que la decisión de la fecha estaba sustentada en el análisis meteorológico, esta misión quedó a cargo del capitán británico James M Stagg (1900-1975).
Inicialmente se eligió el 5 de junio de 1944, pero Stagg pronosticó que ese día el viento sería demasiado fuerte, habría alto oleaje y la visibilidad no sería la óptima. Estas eran condiciones poco favorables para una operación como la de Normandía.
Eisenhower propuso postergar la operación dos semanas, afortunadamente Stagg insistió que el 6 de junio las condiciones serían las óptimas: viento en calma, mar en calma y buena visibilidad.
Un buen pronóstico, la clave del éxito de la operación
El desembarco habría sido un total fracaso si la propuesta de Eisenhower hubiese dominado sin tener en cuenta el análisis de Stagg. Entre los días 18 al 20 junio de 1944, fechas propuestas por Eisenhower, una tormenta afectó el Canal de La Mancha.
La meteorología en otras contiendas bélicas
La importancia de la meteorología en el desembarco de Normandía no es el único ejemplo de cómo las condiciones del tiempo o climáticas se tomaron en cuenta en contiendas bélicas.
Otro ejemplo es la Batalla de Stalingrado también en la Segunda Guerra Mundial. Aquí el crudo invierno ruso, y la resistencia soviética, jugaron un papel crucial en la derrota del ejército alemán en la Batalla de Stalingrado.
En 1815 la Batalla de Waterloo fue afectada por las condiciones meteorológicas, marcando el fin del reinado de Napoleón Bonaparte. La noche anterior y durante la mañana de la batalla llovió tanto que los campos se enlodaron y esto dificultó el movimiento de la artillería y la caballería.
Mejoras en el pronóstico del tiempo
En las últimas décadas ha habido avances significativos en la precisión del pronóstico del tiempo. Varios factores han influido, entre ellos el desarrollo de computadoras más potentes con una mayor capacidad de procesar más datos en un menor tiempo.
Más reciente se añade el uso de la inteligencia artificial y el aprendizaje automático, sobre todo en la capacidad que han mostrado para identificar patrones y tendencias en los datos.