Fábrica de tormentas en la Península de Yucatán
La Península de Yucatán cuenta con una fabrica de tormentas que se forma todas las tardes, además de que en ocasiones refresca el ambiente.
Además de los sistemas meteorológicos que generan lluvias en la Península de Yucatán procedentes de otras regiones, nuestra zona cuenta con una circulación local de vientos que es capaz de engendrar tormentas, además de que provee un refrescamiento ante el intenso calor. Se trata de la vaguada maya.
La vaguada maya es técnicamente una vaguada térmica que se forma todas las tardes sobre la Península de Yucatán, extendiéndose generalmente desde el oriente del estado de Yucatán hasta el sur de Campeche. Se forma después del mediodía por el calentamiento diurno que se da en la zona. El aire cálido al ser más liviano asciende, dejando un vacío debajo de él y dando forma a un canal de baja presión o vaguada térmica.
Esta vaguada térmica genera convergencia de aire húmedo del entorno, que procede del Golfo de México y mar Caribe, llegando del noroeste desde la costa de Campeche, del noreste desde la costa de Yucatán y del este desde la costa de Quintana Roo. El aire húmedo asciende a lo largo del eje de la vaguada formando nubes de desarrollo vertical que en ocasiones pueden convertirse en tormentas.
Cuando hay mucha inestabilidad atmosférica, como por ejemplo cuando se tiene la influencia de sistemas meteorológicos en niveles altos de la troposfera o la llegada de ondas tropicales o frentes fríos; la vaguada maya produce intensas tormentas. Sin embargo, esta vaguada térmica puede provocar la formación de tormentas sin que interactúe con otros sistemas meteorológicos. Simplemente tiene que haber un suministro de humedad y calor suficiente para forzar la formación de nubes tipo cumulonimbus.
Refrescante natural de la Península
Además de las precipitaciones, la vaguada maya da origen a un notable refrescamiento de las temperaturas tierra adentro de la península. Su formación hace que la brisa marina penetre varios kilómetros hacia el interior del continente, lo cual favorece que de manera temporal las temperaturas desciendan. También se incrementa la velocidad del viento en zonas costeras y cerca de la costa.
De hecho, en el pasado los habitantes de la península de Yucatán aprovechaban la circulación de vientos asociados a la vaguada maya, usando las antiguas y conocidas veletas para sacar agua de pozos. La ciudad de Mérida fue considerada “la ciudad de las veletas” a principios del siglo XX por el popular uso de esta herramienta.