El misterio de la lateralidad: ¿por qué somos zurdos o diestros?
Descubra los misterios de la lateralidad humana: cómo la genética y los procesos aleatorios deciden si somos zurdos o diestros.
Alguna vez te has hecho esta pregunta: ¿por qué algunas personas son diestras mientras que otras hacen todo con la mano izquierda? La cuestión de por qué algunas personas son zurdas y otras diestras ha fascinado a los científicos durante mucho tiempo.
Esta particularidad, que afecta aproximadamente al 10% de la población mundial que prefiere utilizar la mano izquierda, es el reflejo de una organización compleja y aún misteriosa del cerebro humano.
Los estudios publicados en revistas como Nature Communications y Scientific Reports han proporcionado detalles importantes, aunque el panorama completo sigue siendo incompleto.
Lo que sí sabemos es que la preferencia por una mano u otra se manifiesta en las primeras semanas de gestación, cuando genes específicos comienzan a influir en el desarrollo de los hemisferios cerebrales de manera sutil pero decisiva.
¿Cuál es el papel de los genes?
El papel de los genes a la hora de determinar la mano dominante es crucial pero complejo.
Clyde Francks, director de investigación del Instituto Max Planck, explica que aunque el desarrollo del cerebro tiende naturalmente a ser diestro, las variaciones genéticas pueden influir en este proceso. En particular, los microtúbulos, estructuras celulares, desempeñan un papel probable en esta orientación. Se han encontrado mutaciones específicas en el gen TUBB4B, que afecta la formación de microtúbulos, con mucha más frecuencia en personas zurdas, aunque esto es raro.
Efectos importantes sobre el desarrollo cerebral asimétrico
Estas variaciones genéticas representan sólo una pequeña porción del ADN y, por lo general, tienen efectos muy limitados en los rasgos humanos. Sin embargo, en algunos individuos pueden tener impactos significativos, influyendo así en su lateralidad.
Estos hallazgos resaltan la interacción entre elementos genéticos raros y sus efectos potencialmente importantes sobre el desarrollo cerebral asimétrico.
¿Tiene el azar un lugar en todo esto?
Junto con los hallazgos genéticos, las investigaciones indican que la lateralidad también podría ser el resultado de procesos en gran medida aleatorios.
Según Francks, las variaciones aleatorias en los niveles de determinadas moléculas durante el desarrollo embrionario podrían inclinar la balanza hacia la izquierda o hacia la derecha, independientemente de influencias genéticas o ambientales.
Esta hipótesis está respaldada por el hecho de que los gemelos idénticos a veces pueden exhibir diferentes preferencias en las manos, lo que ilustra el papel del azar en el desarrollo del cerebro.
Los efectos de los microtúbulos
Además, los microtúbulos podrían contribuir a movimientos asimétricos dentro de las células, promoviendo así el establecimiento de un eje izquierda-derecha durante el desarrollo embrionario.
Estas observaciones sugieren que incluso una ligera interrupción en el proceso puede inclinar la preferencia de mano de un individuo, añadiendo un elemento de misterio a la ciencia de la lateralidad.
La lateralidad tiene implicaciones importantes
Más allá de la curiosidad científica, comprender la lateralidad tiene importantes implicaciones prácticas.
Las personas zurdas están representadas de manera desproporcionada en ciertos trastornos neurológicos y psiquiátricos. Las investigaciones muestran que las personas con esquizofrenia o trastorno del espectro autista tienen más probabilidades de ser zurdas o ambidiestras. Esta asociación sugiere vínculos entre el desarrollo de la asimetría cerebral y ciertos rasgos psiquiátricos, que posiblemente podrían guiar nuevas estrategias terapéuticas.
Todavía muchas incógnitas
Los misterios de la lateralidad continúan fascinando a la comunidad científica e inspirando futuras investigaciones.
A medida que avanzan los estudios de los microtúbulos y otras estructuras celulares, los científicos esperan descifrar aún más los códigos complejos que determinan por qué algunos de nosotros nos volvemos zurdos o diestros.
Referencia del artículo:
¿Por qué nacemos zurdos o diestros? - Magazine Sciences et Avenir