El cometa "Diablo" se acerca a la Tierra y es tres veces más grande que el monte Everest
Un cometa tipo Halley que regresa cada 71 años, será visible en abril de 2024. Su doble coma le ha ganado el mote de "Cometa Diablo".
El "Cometa Diablo" es el nombre popular que se le ha dado al cometa 12P/Pons-Brooks, un cuerpo celeste que orbita alrededor del Sol y que se caracteriza por tener una forma peculiar que recuerda a un par de cuernos.
Este cometa es considerado un visitante no tan frecuente de la Tierra, ya que debido a su período orbital de 71.3 años, apenas se ha logrado determinar que su estructura está conformada por una mezcla de hielo, polvo y gas, conocida como criomagma.
Este cometa tan peculiar tiene un tamaño impresionante, ya que se estima que su diámetro es de unos 4,444 kilómetros, lo que equivale a tres veces el tamaño del monte Everest, la montaña más alta del mundo.
Además, este cometa ha mostrado una actividad volcánica intensa, que ha provocado varias explosiones en los últimos meses, liberando una gran cantidad de material que forma su cabellera y su cola.
71 años después...
La órbita del cometa diablo es muy alargada y elíptica, lo que hace que se acerque y se aleje mucho del Sol en cada vuelta. Según cálculos de los astrónomos, el cometa alcanzará su punto más cercano al Sol, o perihelio, el 21 de abril de 2024, 13 días después del Eclipse Total de Sol que cruzará Norteamérica.
En esa fecha, el cometa estará a 0.44 unidades astronómicas (UA) del Sol, lo que equivale a unos 66 millones de kilómetros. Para comparar, la distancia media entre la Tierra y el Sol es de una UA, o unos 150 millones de kilómetros.
Aunque el cometa diablo pasará relativamente cerca del Sol, no hay peligro de colisión con la Tierra, ya que la distancia mínima entre ambos cuerpos será de unos 0.8 UA, o unos 120 millones de kilómetros. Sin embargo, será visible desde la Tierra sin necesidad de instrumentos especializados, lo que lo convierte en un espectáculo astronómico único y fascinante.
A la orilla del vecindario
Los cometas son cuerpos celestes que se originaron hace unos 4,600 millones de años, cuando se formó el sistema solar. Son restos del material primordial que no llegó a formar parte de los planetas ni de los asteroides. Se encuentran principalmente en las dos regiones más externas del sistema solar: la nube de Oort y el cinturón de Kuiper.
La nube de Oort es una esfera hipotética que rodea al sistema solar a una distancia de entre 50,000 y 100,000 UA del Sol. Se cree que contiene miles de millones de cometas que pueden ser perturbados por las fuerzas gravitacionales de las estrellas cercanas y enviarlos hacia el interior del sistema solar, también conocidos como cometas de largo período, que tardan más de 200 años en completar una órbita.
El cinturón de Kuiper es un anillo plano que se extiende desde la órbita de Neptuno hasta unas 50 UA del Sol. Contiene miles de objetos helados, entre ellos algunos planetas enanos como Plutón o Eris.
También alberga muchos cometas que pueden ser alterados por las interacciones con los planetas gigantes, especialmente con Neptuno, y cambiar su órbita hacia el Sol. Estos son los llamados cometas de corto período, que tardan menos de 200 años en completar una órbita.
Un visitante ¿inesperado?
El cometa diablo pertenece al grupo de los cometas de largo período, ya que proviene de la nube de Oort. Su órbita actual se debe a las perturbaciones gravitacionales que sufrió en el pasado por parte de Júpiter y Saturno.
Fue observado por primera vez en julio de 1812 por el astrónomo francés Jean-Louis Pons, quien lo observó durante 17 noches consecutivas. Sin embargo, no pudo calcular su órbita ni predecir su regreso. En 1883 fue “redescubierto” por accidente por el astrónomo estadounidense William Robert Brooks, quien lo confundió con un nuevo cometa.
Al determinar su órbita y su período, se dio cuenta de que se trataba del mismo cometa que había visto Pons 71 años antes. Por eso, el cometa recibió el nombre combinado de 12P/Pons-Brooks. Desde su descubrimiento ha sido objeto de diversas investigaciones
y más recientemente varias agencias espaciales han mostrado interés, como la NASA, la ESA, la JAXA o la CNSA.
Entre los proyectos que se han propuesto o realizado para observar el cometa diablo se encuentran los siguientes:
- El telescopio espacial Hubble, de la NASA y la ESA, ha tomado varias imágenes del cometa diablo en diferentes momentos de su órbita, mostrando su forma, su tamaño, su color y su actividad.
- La sonda Rosetta, de la ESA, que orbitó alrededor del cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko entre 2014 y 2016, también realizó algunas observaciones del cometa diablo cuando pasó cerca de él en 2015, comparando sus características con las del cometa 67P.
- La misión Comet Interceptor, de la ESA, que se lanzará en 2029, tiene como objetivo interceptar y estudiar un cometa que provenga de la nube de Oort o del cinturón de Kuiper. El cometa diablo podría ser uno de los candidatos a ser visitados por esta misión.
- La misión Destiny+, de la JAXA, que se lanzará en 2024, tiene como objetivo sobrevolar y estudiar el cometa 3200 Phaethon, un asteroide que se comporta como un cometa. Sin embargo, esta misión también podría aprovechar la oportunidad de observar el cometa diablo cuando pase cerca del Sol en ese mismo año.
- La misión ZhengHe, de la CNSA, que se lanzará en 2024, tiene como objetivo explorar el cinturón de asteroides principal y el cinturón de Kuiper. Esta misión podría incluir al cometa diablo entre sus objetivos científicos, ya que se trata de un cometa que proviene del cinturón de Kuiper.
El cometa diablo es, sin duda, uno de los fenómenos astronómicos más interesantes que se puedrán observar desde la Tierra. Su gran tamaño, su forma peculiar, su actividad volcánica y su órbita alargada lo convierten en un objeto valioso para el estudio del origen y la evolución del Sistema Solar.
Además, su próxima aparición en 2024 será una oportunidad única para admirar su belleza y su majestuosidad, algunos días desúes de que suceda un Eclipse Total de Sol en el norte del continente americano.