El animal más raro y misterioso de Europa vuelve a ser visto en Italia
Con el tiempo, se extendieron por la península ibérica, adentrándose después en el suroeste de Francia. Ahora se han avistado varios ejemplares de este animal por primera vez en territorio italiano.
La gineta común, de nombre científico Genetta genetta Linnaeus, es un carnívoro de la familia Viverridae muy extendido en el suroeste de Europa, África y Oriente Próximo. En apariencia se parece mucho a un gato, pero pertenece a la familia de los viverridos, que son carnívoros que se encuentran principalmente en el Mediterráneo y el África subsahariana, donde viven varias especies.
Con el tiempo, se extendió por la península ibérica y se adentró en el suroeste de Francia. En los últimos años, las especies de Genetta se han desplazado más hacia el este, al sur de Francia, hasta acercarse cada vez más a la península italiana.
Los primeros avistamientos en Italia
En los últimos meses, los primeros avistamientos han llegado también de Italia. Sobre todo a lo largo de la frontera con Francia, en las zonas boscosas entre Piamonte y Liguria. Parece que hay ejemplares en el Parque Regional de los Alpes Ligures, en la zona entre Sanremo e Imperia, pero también en la frontera entre Francia y Piamonte.
Avistar una gineta debe considerarse una gran hazaña. Un poco como el "azabache salvaje". Es un animal escurridizo y raro, a menudo escondido entre la vegetación. Se han hecho pocas fotos, también porque en cuanto huele al hombre, el animal huye.
La gineta común vive generalmente en zonas boscosas, tanto perennifolias como caducifolias, donde suele estar asociada a cursos de agua. Evita los ambientes abiertos, aunque a veces se la ha observado en sabanas o granjas. En cambio, está ausente de las selvas tropicales y de las sabanas arboladas.
El único ejemplar capturado en Italia se remonta a los años sesenta, y después casi no hubo avistamientos. En los últimos meses, sin embargo, han aumentado los reportes en Portugal, España y Francia. Esta especie está muy extendida por el suroeste de Europa, donde fue introducida por los romanos, el norte de África y el África subsahariana, la Península Arábiga y Oriente Próximo.
En siglos pasados, este animal se llevaba a bordo de los barcos para mantener alejadas a las colonias de ratones.
Algunas peculiaridades de este escurridizo animal
Como decíamos, la gineta es muy parecida a un gato, pero se asemeja algo al lémur por su larga y gruesa cola, a primera vista. Tiene un hocico puntiagudo con vibrisas, ojos grandes, orejas redondas y un pelaje suave y moteado.
¡DICIEMBRE! Tras un mes de descanso volvemos con una nueva especie del mes. Una belleza que muchos ignoran que habita en la Península Ibérica, la gineta /Genetta genetta/ (Linnaeus, 1758).
— Biólogo de campo (@Biologus_agri) December 1, 2019
Matthieu Berroneau https://t.co/LnhsQe3DGv pic.twitter.com/zlCQvKSg28
Se alimenta de roedores, aves, huevos, reptiles, anfibios, peces, insectos, caracoles, pero también come fruta y setas. Caza con destreza y agilidad entre los arbustos y se esconde en huecos de árboles o madrigueras abandonadas.
Reproducción y época de cría
Dan a luz de una a cuatro crías a la vez al menos dos veces al año, con observaciones en cautividad de al menos tres, tras un periodo de gestación de 10-11 semanas. La camada es cuidada dentro de las cavidades de grandes árboles o en las madrigueras de otros animales.
Al nacer, el cachorro está cubierto de pelo, tiene los ojos y las orejas cerrados y pesa entre 60 y 85 g. Crece muy lentamente y alcanza un peso de 1,5 kg a los ocho meses. Abandona el nido a los 45 días y empieza a comer carne a las siete semanas.
La época de cría está asociada principalmente a las estaciones lluviosas en África, mientras que se produce en primavera y otoño en las regiones mediterráneas. Se observaron hembras lactantes en Etiopía a finales de noviembre, mientras que otras hembras grávidas se observaron de octubre a febrero en Botsuana, y más generalmente de septiembre a enero en el sur de África.
Las hembras alcanzan la madurez sexual a los dos años de edad. La esperanza de vida en cautividad es de hasta más de 20 años, mientras que en libertad no supera los 8-10 años.