Zona de silencio, el misterioso territorio mexicano en el que pocos se atreven a entrar

Esta porción de la República Mexicana, aún en nuestros días, es una de las regiones que sigue siendo analizada y particularmente estudiada por científicos que acuden de diversas partes del mundo. En este mismo sentido, también se han presentes curiosos que vienen a comprobar o desmentir sinfín de leyendas que abundan.

Es un punto donde confluyen los estados de Chihuahua, Coahuila y Durango, extendiéndose en un territorio de aproximadamente 12 mil kilómetros cuadrados, Dentro de sus peculiaridades, encontramos que se instala en una porción aislada, árida y de naturaleza accidentada.

Aquí, las frecuencias radiales no funcionan correctamente, así como los dispositivos electrónicos tienen “comportamiento” inusual. Además, quienes visitan el lugar, dicen que se avistan fenómenos extraños, tales como luces en el cielo, sonidos que no son explicables, así como animales inusuales.

Se le ha etiquetado de esta forma (del silencio) pues las ondas radiales no pueden ser transmitidas de forma normal. Es una porción, dentro del Gran Desierto Chihuahuense que está incomunicado. Trasciende, además, que durante los años más recientes, se han realizado diversas investigaciones para descifrar este fenómeno.

Aparente anomalía magnética

Todo pareciera indicar, que este silencio se debe a que en la región predomina la presencia de una anomalía magnética. Lo que sí es cierto, es que existe mucho magnetismo en el territorio, y no se conoce a cabalidad la razón, y es ahí en donde comienza gran parte del misterio que envuelve a la zona.

Conocido también como Vértice de Trino, está a una distancia de 180 kilómetros de Torreón, en Coahuila, Gómez Palacio y Lerdo, en Durango. También, en la zona, los relojes, brújulas y teléfono celulares operan anormalmente, o simplemente dejan de funcionar. Los extraños eventos, suceden todos los días.

Se han encontrado los meteoritos más antiguos

Aquí, se dice que, se han logrado encontrar también los meteoritos más antiguos que existen en nuestro Sistema Solar. Esta peculiar zona, fue en donde se alojó en la prehistoria, el denominado Mar de Thetis. Y es por esto que, trasciende, se encuentra un rico yacimiento de fósiles marinos.

Conforme a lo que relatan los investigadores, existe también una alta concentración de aerolitos: nombre que se le asigna a los fragmentos que proceden del espacio exterior. Aún en pleno siglo XXI, no existe una explicación definitiva para los fenómenos que se presentan.

Misil Athenea

Fue en el año de 1970, cuando un misil de la NASA, proveniente de Utah, fue lanzado al Campo de Misiles de Arenas Blancas, localizado en la porción Sur de Nuevo México. Se dice que, éste nunca llegó a su destino, desviándose hacia la Zona del Silencio. Derivado de ello, trasciende que contaminó con cobalto 57 la región.

Después de mucho buscar, las autoridades estadounidenses ubicaron su localización. Ante ello, se emprendió una misión a territorio mexicano para comenzar a retirarlo, en "secreto". Incluso, trasciende también, se realizó la construcción de vías de ferrocarril, para trasladar con facilidad los restos radioactivos.

Mitos y leyendas

Existe gran cantidad de leyendas y mitos que provienen de esta enigmática zona. Se dice que, para conocer del primer caso, nos tendremos que trasladar al año de 1930, cuando, por primera vez, un piloto aviador, de nombre Francisco Sarabia sobrevolaba la zona, y fue entonces cuando el radar de la nave dejo de operar.

Por otro lado, en el año de 1964, un Ingeniero de Petróleos Mexicanos, de nombre Augusto Harry De la Peña, investigaba la zona. Detectó irregularidades en la recepción radial. Todo esto sucedió, mientras revisaba la viabilidad de construir un oleoducto. Se dice que los equipos que operaba, operaban irregularmente.

Buscaba respuestas

Derivado de ello, fue que De la Peña trató de encontrar respuestas, descubriendo que las zonas muertas de radio no podían mapearse, pues la señal se dispersaba, quedando en total silencio. Fue de ahí que se derivó el nombre con el que se le conoce.

A fecha reciente, es enorme la variedad de especies que cuentan con características especiales. A citar un ejemplo, las tortugas del desierto que pueden ser vistas, dentro de sus características físicas, poseen pequeños picos en su caparazón, condición que ha llamado de manera sobresaliente la atención de científicos.

Reserva de la Biósfera

Además también, se pueden observar, entre otros, nopales de tonalidades violáceas. Se dice que, su color se debe a una adaptación de esta especie, a los intensos rayos solares que aquí se descargan. En este mismo sentido, derivado de las condiciones específicas y la gran variedad de flora y fauna, desde el año 1978, es un área de reserva, decretada por la UNESCO.

La Reserva de la Biósfera de Mapimí, como también se le conoce, ingresó también al programa de Pueblos Mágicos en el año 2012. Los habitantes de la zona, son los principales interesados en su protección, manteniendo bajo vigilancia de curiosos que llegan a la zona.