¿Ya sabes cómo está tu corazón? Médico especializado, llama a revisar tu función cardíaca
El principal padecimiento cardíaco en México es la cardiopatía isquémica, conocida también como la enfermedad de las arterias coronarias que la gente
conoce también como “angina de pecho”; el infarto del miocardio y la muerte
súbita son otras manifestaciones cardíacas.
Entre las tres principales patologías que causan muerte en México están las enfermedades cardíacas, la diabetes y los tumores malignos. Hoy quiero hablarte de lo que podemos hacer para reducir la probabilidad de desarrollar un problema cardiaco.
Muchas personas no son conscientes del posible riesgo de sufrir eventos del corazón y vasculares, hasta después de enfrentar condiciones como un ataque cardíaco, la ruptura de un aneurisma o un accidente cerebrovascular. Las enfermedades cardiovasculares pueden presentar síntomas vagos o ninguno, por lo que conocer los riesgos puede salvar tu vida.
El cardiólogo del Hospital Houston Methodist, Gholamreza Khoshnevis, indicó que hay una buena noticia y es que puedes ayudar a prevenir el desarrollo de enfermedades cardíacas potencialmente mortales y otras afecciones relacionadas, si tomas algunas medidas que te hablaremos en este artículo.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), de manera combinada las condiciones que afectan a este órgano muscular o a los vasos sanguíneos, por ejemplo, un ataque cardiaco, accidente cerebrovascular e insuficiencia cardiaca, matan a 20.5 millones de personas cada año. La mayoría de los fallecimientos ocurre en países de medios y bajos ingresos.
También se deben conocer los propios factores de riesgo para prevenir la aparición de enfermedades cardíacas y otras afecciones cardiovasculares, dijo el especialista.
Medidas para cuidar el corazón
- Llevar un estilo de vida más saludable al estar activo y seguir una dieta amigable para el corazón.
- Controlar regularmente tu presión arterial y el colesterol.
- Preguntar a tu médico si puedes beneficiarte de una gammagrafía cardíaca o una prueba de detección vascular.
Las pruebas de detección utilizan tecnología de diagnóstico por imágenes, incluidas tomografías computarizadas y ecografías, para buscar síntomas como la acumulación de calcio y el engrosamiento de las arterias. También comprueban si hay obstrucciones y otros signos potenciales de enfermedad cardiovascular.
El Dr. Khoshnevis del Hospital Houston Methodist explica que los exámenes cardíacos y vasculares son beneficiosos para los hombres entre 40 y 65 años y las mujeres entre 45 y 70 años y si tienes alguno de los siguientes factores de riesgo para la enfermedad de las arterias coronarias.
- Fumador actual de cigarrillos, especialmente si eres un fumador empedernido.
- Diabetes.
- Antecedentes familiares de enfermedad cardíaca.
- Presión arterial alta o hipertensión (más de 140/90).
- Colesterol alto (LDL superior a 160)
Cómo prevenir la enfermedad cárdiaca si estás en riesgo
Si tus exámenes de detección indican que tienes una enfermedad cardíaca o vascular, o que tienes un mayor riesgo, hay medidas que puedes tomar para mejorar y controlar tu salud.
Los cambios en el estilo de vida que pueden ayudar a reducir el riesgo de enfermedad cardíaca o de experimentar complicaciones incluyen los siguientes:
- Evitar los alimentos procesados.
- Priorizar las grasas saludables y consumirlas con moderación.
- Adoptar una dieta baja en sal y azúcares añadidos.
- Mantener el azúcar en la sangre bajo control si tienes diabetes.
- Hacer ejercicio regularmente, pero habla con tu médico antes de comenzar un programa de ejercicios.
- Dejar de fumar si fumas.
Si los cambios en el estilo de vida no son suficientes, el médico puede recetar medicamentos según tu situación. Si te han diagnosticado enfermedad de las arterias coronarias, el médico puede recetar aspirina protec, una estatina y potencialmente algunos otros medicamentos.
Para enfermedades más avanzadas, se pueden recomendar procedimientos o cirugías cardíacas o vasculares. Pero es importante que sepas que la mayoría de los procedimientos actuales son mínimamente invasivos y no requieren cirugía a corazón abierto ni recuperaciones prolongadas en el hospital.