Gran tormenta de arena cubre el cielo de naranja y sorprende a turistas en África
Un poderoso e impresionante fenómeno meteorológico pintó de naranja los cielos marroquíes, muy cerca de la costa atlántica. El hecho se viralizó en las redes.
Una intensa tormenta de arena y polvo sacudió a la ciudad de Marrakech, Marruecos, sobre el extremo noroeste del continente africano. El intempestivo fenómeno meteorológico tuvo tal grado de saturación de polvo en el cielo, que lo tornó de color naranja a rojizo. Se supo también, que previo a ello intensos vientos soplaron sobre las costas del Atlántico.
Es importante puntualizar, que el evento ocurrió el reciente jueves 10 de agosto, tiempo local africano. Sin embargo, se ha difundido internacionalmente hasta apenas este viernes 11 de agosto. Trascendió que, repentinamente los vientos se incrementaron.
Las intensas rachas oscilaron sobre los 85 kilómetros por hora, mientras que el valor de la temperatura se ubicaba sobre los 46.5 °C. Este tipo de eventos se presentan, cuando intensos vientos arrastran grandes cantidades de polvo y arena, de suelos secos y sin cobertura vegetal.
A decir de la Organización Meteorológica Mundial (WMO, por sus siglas en inglés), en la última década los científicos se han percatado de los impactos que provocan este tipo de fenómeno meteorológico. Y es que, no solo inciden en las condiciones meteorológicas, sino que también ocasionan cambios en la salud humana.
Grandes cantidades de polvo y arena son arrastradas
Además también, se presentan repercusiones sobre el medio ambiente en general y muchos sectores socio económicos. Los peligros meteorológicos, por su naturaleza, inciden en primera instancia en las regiones áridas y semi áridas, producto de fuertes gradientes de presión, incrementando la velocidad del viento.
Los intensas rachas , arrastran grandes cantidades de arena y polvo, de suelos desnudos y secos, los cuales son traslados a miles de kilómetros de distancia. La WMO explica que, un 40 % de los aerosoles de la tropósfera, son partículas de polvo provenientes de la erosión eólica.
El fenómeno es frecuente sobre África, Asia y China
Por otra parte, las principales regiones en donde se originan son las zonas áridas de África septentrional, península arábiga, Asia central y China. Porciones desérticas de Australia, Estados Unidos y Sudamérica son fuentes menores, aunque también importantes.
Mediante modelaciones simuladas, se estima que, mundialmente las emisiones de polvo varían entre una y tres gigatoneladas por año. El polvo en suspensión, constituye un grave riesgo para la salud humana, y el tamaño de las partículas determina el potencial peligro para la salud.