Un riesgo más para los migrantes que están en situación de crisis migratoria en el Norte de México
Aunado a la ya de por sí pérdida millonaria por el cierre de puentes fronterizos, se suma un riesgo adicional que puede poner el riesgo la vida de los migrantes.
En medio de la preocupante situación, que enfrentan autoridades del sur de Estados Unidos y los gobiernos de los estados fronterizos del norte de nuestro país, ante el creciente número de centro y sudamericanos, que buscan llegar a la Unión Americana, se suma un potencial riesgo adicional a los migrantes que buscan mejorar su condición de vida.
Y es que, recordemos que a partir del mes de septiembre, dio inicio el otoño, y con él se incrementa la posible presencia de sistemas frontales, que en muchas ocasiones están acompañados de masas de aire polar intensas. Es bien sabido, por quienes viven en el Norte de nuestro país, que los cambios bruscos de temperatura suelen ser más frecuentes.
En este mismo sentido, el riesgo de padecer enfermedades respiratorias se incrementa por naturaleza a quienes viven en la región, cuánto más para quienes son foráneos: después de que en un día se puedan presentar temperaturas máximas de alrededor de 30 °C, al siguiente, con el desplazamiento de alguna masa de aire polar, el valor mínimo fácilmente se puede ubicar inferior a 10 °C.
Los grupos de personas que integran las caravanas migrantes, viajan también menores. Sabemos que tanto los niños como los adultos mayores son la población más vulnerable ante los cambios repentinos en la temperatura. Por esta razón, factores como el valor de la temperatura, frentes fríos y vientos, ponen en riesgo su integridad.
Clima tropical y sus beneficios
Por otro lado, hablar de las condiciones climáticas en Centroamérica, es referirnos a un clima tropical: condiciones cálidas, siendo lluviosas en el Caribe y más secas hacia el Pacífico. El valor de la temperatura media anual es de unos 24 °C, sin exceder habitualmente los 32 °C, como valor máximo. Condiciones muy diferentes a las que se presentan hacia el Norte de nuestro país.
Adicionalmente, con la combinación de altas temperaturas e importante presencia de lluvias, el clima tropical resulta favorable para el crecimiento de abundante vegetación, extensas superficies de bosques húmedos y selvas, además de la gran biodiversidad de especies de animales y plantas. Científicos afirman que es el ambiente natural para obtener beneficios como material de curación y alimento.
Entre frío y calor
En buena parte del Norte de México se ubica el desierto chihuahuense, caracterizado por amaneceres y anocheceres frescos a fríos, con valores que muchas veces se ubican por debajo de los 10 °C, y en casos extremos, inferiores a 0 °C durante el otoño. En este mismo sentido, las temperaturas máximas fácilmente superan los 25 a 30 °C.
Además, gran parte del tipo de vegetación son cactáceas y arbustos, sitios en donde difícilmente se podría resguardar una persona ante un calor o un frío intenso. Por todo lo anteriormente descrito, las condiciones climáticas pueden representar un factor de riesgo adicional para quienes se encuentran migrando.
Ayuda humanitaria
Las autoridades del norte del país, particularmente en Chihuahua se han pronunciado por brindar ayuda humanitaria a los migrantes, sin que con ello se busque suplantar la responsabilidad que por naturaleza es de la Federación. Trasciende que miles de personas salen diariamente de países de Centro y Sudamérica buscando llegar a Estados Unidos.
De acuerdo con datos del Gobierno del Estado de Chihuahua, en términos económicos, la industria maquiladora sumó hasta el día 2 de octubre, más de 947 millones de dólares de pérdidas. Mientras tanto, la Patrulla Fronteriza sector El Paso, Texas, informó que durante el mes de septiembre detuvo un promedio de mil 272 migrantes por día.
Centros de movilidad
Mientras esto ocurre en el Norte, medios de comunicación en Oaxaca informan que en apenas una semana, más de 13 mil personas migrantes se han internado a esa entidad, en su paso hacia la frontera Norte. Se dice que, en el Istmo y la capital es notoria su presencia. Con lo anterior, las autoridades estatales se han visto obligadas a establecer Centros de Movilidad Migratoria.
Se dice que, durante los primeros días de octubre, se han internado en la frontera Sur de México 35 mil personas, de los cuales han llegado a Oaxaca por lo menos 12 mil 532 personas, de los cuales se incluyen 7 mil 264 mujeres, 5 mil 268 hombres y 3 mil 156 niñas, niños y adolescentes.