Servicio Meteorológico Nacional cumple 141 años
Desde hace 141 años que en México se practica la meteorología de manera sistematizada. Con el paso del tiempo, el Servicio Meteorológico Nacional ha evolucionado en muchos aspectos. Te invitamos a leer la historia.
El 6 de marzo de 1877 el observatorio meteorológico y astronómico comenzó a operar en el Castillo de Chapultepec, por decreto del entonces presidente Porfirio Díaz y el ministro de fomento Vicente Riva Palacio. Su primer director fue el ingeniero Mariano Bárcena, jefe de la primera comisión geográfica exploradora del territorio nacional en el año 1878.
Para 1883 el observatorio meteorológico y astronómico se mudó al edificio del ex Arzobispado en Tacubaya, donde actualmente se localiza. Una vez establecido el observatorio meteorológico central, Mariano Bárcena se fijó el objetivo de conformar una red de recopilación de información meteorológica, por lo que propuso primeramente 10 estaciones meteorológicas en las costas del Golfo de México, 10 en el Pacífico y 26 en las capitales de los estados. Para 1880, México ya formaba parte de los 23 países que realizaban mediciones meteorológicas en forma sistematizada.
En 1899 el observatorio meteorológico central cerró el primer capítulo de su historia, cuando el ingeniero Mariano Bárcena falleció luego de 22 años de fungir como director. Su sucesor, el ingeniero Manuel Pastrana, continúo con los trabajos iniciados por Bárcena, y en 1901 se inauguró el Servicio Meteorológico Nacional.
Con la revolución, la red nacional de meteorología entró en una pausa, además de que el observatorio meteorológico central fue clausurado temporalmente en 1915, aproximadamente por 7 meses; cuando reanudó operaciones lo hizo bajo el mando del ingeniero Joaquín Gallo. Con el paso de los años, el servicio meteorológico nacional pasó a ser parte de varias dependencias gubernamentales, hasta que en 1946 fue adscrita a SARH y finalmente a la comisión nacional del agua.
La actualidad
El Servicio Meteorológico Nacional con sede en Tacubaya, Ciudad de México, recopila diariamente información obtenida de observatorios meteorológicos, estaciones meteorológicas automáticas, convencionales, así como de radares, estaciones de radio sondeo e imágenes de satélite.
Esta información se distribuye en diferentes departamentos de la institución que van desde monitoreo en tiempo real hasta climatología. Después de obtener las condiciones reales de la atmósfera, se inicia un proceso de previsión de las condiciones que se avecinan o del comportamiento de los fenómenos meteorológicos que estén afectando en algún momento el territorio nacional.
El trabajo se complementa con la interpretación de modelos matemáticos de pronóstico, que son generados previamente por el equipo de monitoreo ambiental. Este departamento se encarga de convertir la información meteorológica matemática en mapas del tiempo en los que se pueden visualizar diferentes tipos de variables, lo que al final resulta en una herramienta prioritaria para los meteorólogos, ya que con base en la interpretación de estas cartas se generan las previsiones.
La interpretación de estas cartas y del pronóstico oficial está a cargo del área de previsión del tiempo, equipo que analiza e interpreta los modelos de pronóstico. Después de llegar a un acuerdo en torno a las condiciones meteorológicas que se esperan, se convoca a una discusión meteorológica por videoconferencia para mostrar a los meteorólogos de otros estados las condiciones que se prevén para que finalmente se llegue a un pronóstico oficial.