Intensas lluvias saturan el suelo y provocan considerables inundaciones, en campos y carreteras de Francia
La precipitación fue de tales características que, las consecuentes inundaciones alcanzaron niveles récord históricos. Dos departamentos se encontraron en alerta roja, mientras otros ocho en alerta naranja por las inundaciones.
Conforme a la información generada por autoridades de Meteorología en la nación europea, lo departamentos de Côte-d'Or y Saona y Loira se encontraban en alerta roja por las inundaciones que se presentaron. Mientras, Aube, Côte-d'Or, Nièvre, Indre y Loira, Charente, Charente Marítimo, Dordoña y Gironda, se mantuvieron en estado naranja.
Trascendió que, en Côte-d'Or decenas de ciudadanos habrían tenido que ser evacuados, para evitar ponerlos en riesgo, debido al incremento considerable en el nivel del agua. Mientras tanto, se supo que, fueron dieciocho personas las que se rescataron de los albergues en Buffon.
En algunos municipios, es tal la acumulación de agua, que las inundaciones alcanzaron niveles récord. En Quincy-le-Vicomte y Aisy-sur-Armancon, se consideraron como excepcionales las inundaciones, pues el lunes por la tarde se superaron a las inundaciones históricas de 2013 y de 2016.
Para este jueves 4 de abril, los Departamentos de Yonne y Aube, se mantenían en alerta naranja máxima. Mientras, una nueva jornada de lluvias se presentó sobre la mitad norte del país, con trayectoria de Oeste a Este. Las autoridades en Meteorología, explicaron que: “este jueves por la mañana se seguirán observando numerosos y perjudiciales desbordamientos”.
Niveles superan a los de abril de 1998
El alcance de los almacenamientos, han superado a los del mes de abril del año de 1998 en la parte alta, y son del mismo orden que los del mes de mayo del año 2013. Chablis, ha sido una de las ciudades más vulneradas, considerando que el pico se alcanzó por la noche del martes y hacia la madrugada del miércoles.
Expertos técnicos, señalan que estas tormentas se originaron, en parte, a masas de aire muy húmedas, que se desplazaron desde el Mar Mediterráneo y del Océano Atlántico, asociadas al incremento en el valor de las temperaturas. El aire húmedo, es impulsado por los vientos del Oeste hacia Francia.
Futuras inundaciones, no dependerán solo de precipitaciones
"La persistencia de las inundaciones, no dependerán exclusivamente de las precipitaciones", refiere el investigador y Meteorólogo, Alexandre Isgro, insistiendo en que también estarán influidas por la composición del suelo, así como de su permeabilidad. En específico, señala, de saturarse el suelo, el agua ya no puede ser absorbida.
Ante ello, el vital líquido escurrirá hacia zonas más bajas, provocando que se desborde. Actualmente, se explica, uno de cada cuatro franceses vive en zonas inundables; esta proporción podría aumentar debido a que las actividades humanas se realizan en zonas cada vez más expuestas, que no están bien adecuadas para soportar inundaciones.
Adaptación, fundamental
“El costo de las inundaciones se está incrementando, pero esto no se debe sólo al aumento en el volumen de agua. Debemos intentar adaptarnos a las lluvias extremas, que tenderán a incrementarse”. Los investigadores, señalan que el calentamiento global también influye en la vulnerabilidad a las inundaciones de determinadas zonas costeras.
"La combinación de lluvias intensas y el incremento en el nivel del océano, complica el flujo de los ríos hacia el mar, que puede desencadenar en desbordamientos e inundaciones". Con ello, se demuestra que la naturaleza de este tipo de fenómenos meteorológicos es multifactorial, concluyeron.