Pese a protestas, Japón permitirá la caza comercial de la segunda ballena más grande del mundo
Actualmente Japón caza tres especies de ballenas, próximamente se autorizará una cuarta del tipo rorcual, conocida como el segundo animal más grande del planeta.
La Agencia Japonesa de Pesca anunció el 9 de mayo que añadirá la caza comercial de ballenas de aleta (rorcual) a su lista de cetáceos permitidos. Actualmente el país asiático captura tres especies de ballena más pequeñas que autoriza la norma de caza comercial de ballenas en torno a sus costas.
La ballena de aleta, conocida como el segundo animal más grande del planeta, se podrá cazar con fines comerciales después de que Japón retomara estas actividades para otros tipos de ballena en 2019 tras más de tres décadas.
La justificación de las autoridades japonesas para lograr permitir la caza del rorcual es que este recurso marino se debe utilizar como cualquier otro ya que lo consideran una fuente importante de alimentación.
Hasta ahora, Japón permitía la caza de tres tipos de ballenas: la ballena de Bryde o de ojos grandes, la de Minke y la ballena de Sei, también conocida como norteña o boba.
Captura de ballenas y críticas por la decisión del gobierno japonés
El plan no pretende incrementar el suministro de carne de ballena, y los balleneros que cacen rorcuales no tendrán que cumplir necesariamente una cuota. Para el 2024, la agencia de pesca ha marcado una cuota combinada de capturas de 379 ejemplares de las otras tres especies de ballenas.
Esta decisión se produce después de comenzar a recoger opiniones de los ciudadanos el 7 de mayo de 2024 y hasta principios de junio, esto a pesar de las críticas recibidas por parte de los grupos en contra de la caza de cetáceos.
Japón reanudó en julio de 2019 la captura comercial de ballenas en sus aguas, una práctica que oficialmente no llevaba a cabo desde hace 32 años y que motivó que el país abandonara la Comisión Ballenera Internacional (CBI), que veta la caza de esos animales.
Poco consumo, una justificación para la caza del cetáceo
Mientras tanto, el apetito por este tipo de carne sigue en mínimos históricos oscilando entre las 1,000 y 2,000 toneladas al año, lo que supone menos de un 1 % del consumo que se realizaba en la década de 1960, que era de unas 200,000 toneladas al año.
Esta caza ha deparado críticas de parte de la comunidad internacional e incluso una sentencia de la Corte de la Haya en contra de Japón, que defiende esta actividad pesquera como parte de su tradición y por su importancia económica pese al escaso consumo que se da actualmente en el país de la carne de cetáceo.
Consumo de carne de ballena, una cuestión cultural
La carne de ballena, que se consume en el archipiélago nipón en sashimi (cortes crudos), rebozada o cocida, fue un alimento muy apreciado en el Japón de posguerra por su bajo coste y alto valor nutricional.