Oscilaciones indicadoras de frío: MJO, AO y NAO, ¿alguna genera efectos invernales en México?
Los meteorólogos nos basamos en el comportamiento de grandes sistemas de presión invernales para determinar periodos fríos potenciales. Aquí podrás conocer algunos de ellos y sus efectos en México.
Hasta el momento, el invierno se ha comportado en lo general como se tenía previsto, con más periodos de lluvias y frío, concentrados hasta el momento en la franja centro-sur, el cual podría invertirse, alcanzando estados del norte este mes de enero, situación que ya se tenía previsto por parte de meteorólogos de forma anticipada.
El Niño, una gran teleconexión entre el océano y la atmósfera presenta patrones en las condiciones meteorológicas que nos permite prever en varias partes del mundo a largo plazo. Pero existen otras oscilaciones, asociadas a grandes sistemas de presión que se establecen hasta por semanas, cambiando el tiempo significativamente.
Oscilaciones atmosféricas: ¿Dónde y cómo afectan?
En latitudes extratropicales y polares, por arriba de los 30° norte/sur, se pueden formar extensas zonas donde la presión atmosférica alcance una intensidad máxima o mínima, ya sea altas o bajas presiones, quedándose por algunos días o incluso hasta semanas, cambiando por completo el estado del tiempo y extendiéndose a zonas adyacentes.
Oscilación Ártica, AO
El cambio de la presión atmosférica entre el Ártico y latitudes medias en Norteamérica, relacionada con el vórtice polar y existiendo las fases positiva y negativa. En cuestiones de masas polares, en fase negativa implica que la presión en el Ártico aumenta, la corriente en chorro se ondula y el aire frío sale del polo.
En este caso, es factible que alcance zonas del territorio mexicano, especialmente de Chihuahua hacia Tamaulipas, en la Vertiente del Golfo, Altiplano y península de Yucatán, sin tener impactos relevantes en los estados del Pacífico.
Actualmente, la oscilación está en fase negativa, con tendencia a mantenerse así o próxima a neutralidad, por lo que estará latente el ingreso de masas polares/árticas desde Estados Unidos hacia México.
Madden-Julian, MJO
Como se ha mencionado, es una onda que circula en zonas tropicales, dando la vuelta en promedio cada 60-90 días generando cambios en el comportamiento de lluvias y ciclones tropicales en verano. Durante los inviernos, ocasiona contrastes en las temperaturas, dependiendo su ubicación y amplitud.
Se puede identificar en mapas especializados con su ubicación, mediante 8 fases relacionadas a distintos comportamiento de temperaturas en Norteamérica, resaltando las fases 1, 2, 5, 7 y 8 que implican valores por debajo de lo normal (más frío) desde Estados Unidos hacia México.
Actualmente, esta oscilación se encuentra en fase 2, pasando a la 3 esta primera quincena de enero, previéndose periodos fríos para territorio mexicano.
Oscilación del Atlántico Norte, NAO
Similar a la Ártica, se identifican cambios en las presiones, pero en este caso es entre el Polo norte y el Atlántico norte, así como el extremo occidente de Europa, también con fases positivas y negativas. Cuando se establece un bloqueo anticiclónico entre Groenlandia y el Atlántico norte, se habla de fase negativa.
Generalmente, esta oscilación afecta más el oriente de Canadá y Estados Unidos, así como Groenlandia y Europa favoreciendo periodos de frío intenso, heladas y ventiscas; pero cuando es fase positiva, el bloqueo desaparece y los ciclones extratropicales tienen el camino libre para cruzar y generar lluvias con ambiente menos frío.
En nuestro país tiene poca influencia, pero ocasionalmente puede favorecer en fase negativa una mayor recurrencia de vórtices fríos al norte de México, así como Suradas en el Golfo de México (periodos calurosos). No siempre ocurre y justamente, no se relaciona en su totalidad con eventos fríos extensos.
Combinación de oscilaciones y El Niño
Se ha observado que, bajo la presencia de El Niño (como este invierno), el efecto de la AO y MJO es mayor, traduciéndose a periodos fríos más recurrentes, así como de precipitaciones, los cuales ya se asocian con El Niño siendo más relevantes al combinarse. Veremos si este 2024 se llega a dar esta situación.
En enero de 2010, se dio un caso justo con un El Niño fuerte, la Oscilación Ártica estuvo en fase negativa con valores récord, permitiendo un gran periodo de frío desde Canadá hasta México asociado a lluvias intensas, nevadas extensas y temperaturas muy bajas, congelando Los Grandes Lagos.