Ataques de Rusia a Ucrania podrían originar contaminación nuclear
A través de la historia, hemos aprendido que con la Guerra se tiene mucho que perder, tanto en el ámbito humano como en el económico, pero también se perjudican y dañan fuertemente los ecosistemas ambientales, degradándose y contaminandolos.
Además de la muerte y destrucción en la infraestructura urbana ucraniana, donde miles de personas viven y están siendo agraviadas, traumatizadas y en el peor de los casos asesinadas, la invasión rusa está también dispuesta a alterar los desechos nucleares y químicos altamente sensibles en Chernobyl y Donbas, en Ucrania.
Hoy, las tropas rusas tomaron la planta nuclear de Chernobyl en medio de cientos de advertencias sobre la propagación de desechos radiactivos que son sumamente tóxicos para cualquier forma de vida, si estos fueran liberados.
Esta situación traerá consigo una catástrofe ambiental de tipo nuclear y químico, que podría ser permanente e irreversible. Es increíble que a pesar de que representantes gubernamentales de todo el mundo saben sobre la actual crisis ambiental que estamos sufriendo, aun así existan líderes de países que continúan dispuestos a empeorar la situación climática.
A medida que las tropas rusas toman Chernobyl e invaden la región de Donbas, altamente industrializada, a los científicos de la atmósfera y tierra en todo el mundo, les preocupa que esta invasión pueda crear una catástrofe ambiental permanente.
Ataques tácticos de guerra, un riesgo máximo para el ambiente
Esta mañana el Ministerio del Interior de Ucrania dijo que las tropas rusas provenientes de Bielorrusia habían ingresado a la zona del desastre nuclear que rodea a Chernobyl. El asesor advirtió que los combates alrededor de Chernobyl podrían perturbar los desechos nucleares en la zona de exclusión, una región de 1,000 millas cuadradas que rodea el sitio del desastre nuclear ocurrido en 1986.
Por su parte, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania tuiteó que un ataque ruso contra Ucrania podría “causar otro desastre ecológico”. La zona de exclusión se encuentra en frontera con Bielorrusia, lugar por donde ingresaron las tropas rusas.
“El este de Ucrania es muy industrial, lleno de fábricas químicas, minas en ruinas y plantas de energía térmica. El potencial de que una catástrofe ambiental se sume a la terrible crisis humanitaria es enorme”, dijo Richard Pearshouse, jefe de crisis y medio ambiente de Amnistía Internacional en Ginebra.
Contaminación desmedida
Ucrania cuenta con alrededor de 15 reactores de energía nuclear en cuatro plantas que abastecen a más de la mitad del país, de ser golpeadas, podrían liberar desechos radiactivos que contaminaría el área durante miles de años.
Entre estas instalaciones se encuentra la planta nuclear más grande de Europa, la planta de energía Zaporizhzhia, que se encuentra a unas 125 millas al oeste de la zona de combate de Donbas y pronto podría encontrarse directamente en la primera línea del conflicto. Esto causaría un daño ambiental desconocido y también amenazaría la seguridad energética del país.
Tan solo Donbas cuenta 900 minas de carbón y metalúrgicas activas e inactivas que han degradado la calidad del aire local y han filtrado toxinas en los suministros de agua. Las imágenes satelitales capturadas por la empresa de análisis espacial del Reino Unido Terra Motion entre 2015 y 2020 muestran minas abandonadas en la región que se llenan de agua, como resultado de la negligencia del régimen separatista.
Se supone que las toxinas de las minas abandonadas se limpian y tratan con regularidad para evitar que la mina se inunde sin control, pero dado que esto no ha estado sucediendo, algunas se están llenando y podrían filtrarse contaminando fuentes de agua potable y ríos cercanos.
Los actuales ataques a centrales eléctricas también han provocado el derrame de crudo y la liberación de toxinas en el aire-agua-tierra. Por el bien del mundo y su estabilidad natural digamos NO A ESTA GUERRA que bien podría solucionarse de otra forma.