Las tremendas imágenes que ha dejado Beryl en su trayectoria por el Caribe y Golfo de México.
Beryl, el primer huracán mayor de la temporada en la cuenca del Atlántico, ha destacado por la magnitud de su fuerza súbita en una naturaleza imprevisible; dejándonos una secuencia de momentos impresionantes que revelan tanto la majestuosidad, como la destrucción que un huracán puede desencadenar.
Con una trayectoria desde las aguas cálidas del Atlántico, pasando por el Caribe y hasta el Golfo de México; el ahora “histórico ciclón tropical Beryl, marcó un nuevo precedente en la expectativa de la etapa temprana de la temporada de huracanes.
Una travesía atípica y llena de récords hacia el Caribe
Provocando lluvias torrenciales, vientos catastróficos y marejadas ciclónicas, Beryl tocó tierra por primera vez como un huracán categoría 4 en la isla Carriacou de Grenada con vientos máximos de 241 km/h. Los efectos devastadores de su paso en estas pequeñas comunidades dejaron conmoción en el mundo entero, siendo la antesala para el resto del Caribe de lo que estaba por venir.
En parte de su travesía 'Beryl', se convirtió en el huracán de categoría 4 y 5 más temprano registrado. El lunes 1 de julio, después de azotar la isla de Granada, la tormenta se fortaleció sobre mares cálidos, convirtiéndose en el primer huracán de categoría 4 registrado.
Rompió el récord establecido por el huracán Dennis, una tormenta de categoría 4, el 8 de julio de 2005. Beryl también se convirtió en el huracán de categoría 5 más temprano registrado.
Posteriormente, el siguiente destino de su trayectoria fue Jamaica, en donde afortunadamente su paso fue breve. Sin embargo, los daños causados por los extensos acumulados de lluvia en esta región, dejó a más de 400,000 damnificados sin acceso a los servicios básicos esenciales.
Por otro parte, el pais caribeño se enfrentará a una escasez de alimentos, ya que se estima que el ciclón destruyó más de 6,4 millones de dólares en cultivos alimentarios e infraestructura de apoyo, dijeron en un comunicado a medios este lunes funcionarios de la isla.
Después llego a las Islas Caimán, durante la mañana del jueves 4 de julio, Beryl se degradó de categoría 3 a categoría 2, gracias a los factores atmosféricos en su travesía sobre las Antillas.
Y al final en su viaje por el Caribe, el viernes 5 de julio, Beryl ingresó a 10 km al noreste de Tulum cómo huracán categoría 2, registrando vientos sostenidos de 175 km/h y ráfagas de hasta 220 km/h.
Afortunadamente, se debilitó en poco tiempo a tormenta tropical y emergió de forma temprana al Golfo de México, alejándose de la trayectoria prevista y dejando menos daños en tierras mexicanas.
Su trayectoria final, difícil de pronosticar
Una vez adentrándose en el Golfo de México, Beryl encontró un ambiente más favorable para la reorganización de sus bandas nubosas, además de temperaturas cálidas que le permitió volver a tomar fuerza para una vez más acercarse nuevamente a tierra como un huracán categoría 1, esta vez en las costas del sureste de Texas, en Estados Unidos.
En esta recta final como un huracán, Beryl avanzó en la costa este del estado, donde causó lluvias torrenciales de manera ininterrumpida, que provocaron inundaciones repentinas con acumulados mayores a 12 pulgadas , que se extendieron hasta la ciudad de Houston, donde hasta el momento se ha contabilizado más de 2 millones de personas afectadas.
Beryl, marcó un nuevo precedente en el estudio de los ciclones tropicales
El estudio de la extrema evolución en los fenómenos atmosféricos de gran intensidad recientes, no solo es crucial para la ciencia y la meteorología, sino también para la seguridad y la preparación de las comunidades frente al desarrollo de eventos cada vez más extremos en el futuro.
En este sentido, el estudio del desarrollo de los ciclones tropicales resulta indispensable para comprender la dinámica climática actual, a medida que el cambio climático intensifica estos fenómenos a extremos inimaginables, subrayando la urgente necesidad de adaptarnos y mitigar sus efectos.