Refranero meteorológico del mes: 'Llueva o no llueva, en Agosto la huerta riega'
El empleo de refranes, nace de la antigua tradición de comunicar ideas. La mayoría, encierran una sabiduría que viene comunicándose de generación en generación, expresando ideas que tienen que ver con el comportamiento de fenómenos meteorológicos y las estaciones del año.
Son Ideas que se comunican de generación en generación, que tienen que ver con la experiencia y sobre todo la observación de los fenómenos meteorológicos que se van presentando, muchos de ellos asociados a la climatología que está directamente asociada a las estaciones del año.
Los refranes, están presentes en el tradicional vocabulario de nuestra sociedad, y aunque no en todos los casos se tienen expresiones para cada uno de los meses y / o estaciones del año, sí manifiestan el conocimiento de nuestros ancestros, que han sido expertos en la observación de los fenómenos meteorológicos, dando una expresión sencilla.
De manera metafórica, podemos encontrar expresiones como: “llueva o no llueva, en agosto la huerta riega”, que tiene que ver con un cambio en el comportamiento de la temporada de lluvias.
En zonas como el Norte del país, este mes aún es llovedor y se encuentra asociado a eventos como el Monzón de Norteamérica. También, durante el mes de agosto, pueden presentarse tormentas sorpresivas, que vienen acompañadas en ocasiones de granizo.
En Agosto, a sol puesto no te conozco
Las precipitaciones suelen presentarse de forma violenta e intensa, pero por un breve lapso. De ahí, la idea de que, aunque haya precipitaciones, es conveniente que se rieguen los cultivos.
Conforme dejamos a través el solsticio de verano, poco a poco se va “adelantando” la noche. O dicho de otra forma, por fracciones de segundos, la duración de la luz se va reduciendo poco a poco hasta que nos encontremos en el solsticio de invierno.
De ahí, esta expresión popular, aunque por muchos no tan conocida ni de uso tan frecuente. Sabemos que, este año el día más largo del año sucedió el reciente jueves 20 de junio. Posterior a esa fecha, y por fracción de segundos cada día, el día se va reduciendo, conforme nos acercamos al invierno. Este evento no volverá a repetirse, sino hasta el 21 de junio de 2025.
Agosto hace el mosto
El término “mosto”, proviene de una expresión en latín “mustum vinum” o vino joven. Este, no es otra cosa que el zumo / jugo de la uva, que puede consumirse recién “exprimido”, o una vez fermentado hecho vino. Cabe señalar que, la palabra mosto, como tal, hace alusión a un tipo de vino joven en España.
Para un Sommelier, es una expresión de uso común. Y la frase: “agosto hace el mosto”, expresa que durante este tiempo del año, se genera una considerable insolación que, es aprovechada en buena medida por las uvas para madurarse, proporcionando un buen grado de alcohol a los vinos.
En nuestro país, el 24 de agosto se conmemora anualmente a San Bartolomé. En algunas regiones de nuestro México, incluso se emplea la expresión que señala “el diablo anda suelto”.
Por San Batolomé, tormentas has de tener
Tradicionalmente, se tiene la creencia de que en esta fecha el maligno murió luego de perder la carrera con el Santo, que fue uno de los 12 apóstoles de Jesús. Para esa fecha, dentro de las tradiciones católicas, se recomienda, durante toda la jornada, evitar realizar actividades peligrosas, e incluso hay quienes piden evitar salir de sus casas.
Y es que, se cree que año con año, a las 23:00 horas del 23 de agosto, se le salen las cadenas al diablo, que lo tienen atado al infierno. San Bartolomé era doctor en la ley judía y era amigo de San Felipe Apóstol. Se dice que Bartolomé fue un hombre “en quien no había engaño”, y su mente siempre estaba abierta a la verdad.
Se explica que fue voluntariamente con Felipe a ver a Jesús, reconociendo inmediatamente al Salvador como el Hijo de Dios. Después de recibir los dones del Espíritu Santo, en el primer pentecostés, Bartolomé evangelizó Asia menor, el noroeste de la India y la Gran Armenia.
Creencia popular
En esta última nación, mientras predicaba a los idólatras, fue arrestado y condenado a muerte, falleciendo un 24 de agosto. Se dice que, el motivo por el cual el maligno decide desatar su furia cada 24 de agosto es por la celebración de San Bartolomé, con quien perdió una carrera.
A consecuencia de ello terminó hundiéndose en un río, y como venganza, aquél regresa cada año, a manchar con su paso la fecha del Santo Patrono. La creencia popular, señala que ese día, se recuerda “La carrera en el monte Gasñape”.
Se dice que el diablo decidió retar al apóstol a una carrera, en donde se apostaran las riquezas, cuya recompensa obtendría el que ganara llevándose todo. La referencia señala que, luego de llegar al cerro Gasñape, el malvado mostró gran ventana.
Pidió fuerza a Dios
Bartolomé viendo que podría perder, se arrodilló pidiendo fuerza a Dios. Se hizo tan fuerte, que de un salto cruzó el caudaloso río Chimaca, cayendo en una piedra que le permitió continuar su carrera. Cuando el diablo intentó hacer lo mismo, se hundió, con las fatales consecuencias para él.
Como ya se dijo, los refranes son expresiones populares, que comunican de generación en generación historias, tradiciones e incluso condiciones climatológicas. Esta, es una buena manera de mantener vigente el comportamiento del clima a través del tiempo, así como de recordar la historia y tradiciones.