El Vórtice Polar colapsó en la Estratósfera hace unos días y el tiempo de México arrastrará consecuencias hasta abril
La primavera de este 2025 será muy distinta a la de los últimos años debido al colapso del Vórtice Polar, trayendo cambios importantes en las lluvias y temperaturas sobre gran parte de México.
Tal como indicaban los escenarios a largo plazo, un Calentamiento Estratosférico Repentino (SSW) apareció sobre Siberia a principios de marzo, situación que perturbaría por completo al Vórtice Polar, haciendo que colapsara por completo su circulación y mandando ese frío almacenado hacia el sur. ¿Qué tanto nos tocará en México?
Fin del Vórtice Polar de 2025
Normalmente, la temporada del Vórtice inicia en septiembre, alcanzando su máximo entre enero y parte de febrero, llegando a su fin en abril. Hay años con mayor o menor actividad invernal, para desaparecer lentamente “sin dejar rastro”, pero hay otros años en que el SSW hace más severo y extenso el frío, para ponerle fin al vórtice rápidamente.
Esto ha ocurrido durante 2024-2025 cuando varios calentamientos perturbaron al Vórtice, pero sólo estirando su circulación con efectos en Eurasia y Norteamérica, siendo lo más relevante desde finales de febrero e inicio de marzo cuando otro SSW apareció en Siberia con gran intensidad, estirándolo, para después dividirlo en dos y ahora, hacer que su circulación desaparezca.
El Vórtice gira en contra de las manecillas del reloj sobre el polo norte desde superficie hasta 30-35 km de altitud almacenando el frío; con este calentamiento repentino, hizo que se dispersara y cambiara su circulación por completo, invirtiéndose ahora a favor de las manecillas del reloj. Esto culminará en efectos sobre varios países de nuestro hemisferio próximas 4-8 semanas.
Es muy probable que ya no se reorganice, habiendo llegado a su fin, pero sus efectos sí se extenderían a casi todo el mes de abril, variando intensidad dependiendo la ubicación. La dinámica que se tiene prevista es muy compleja y, a continuación, se mencionarán los escenarios generales más probables.
Escenarios a largo plazo
Para garantizar que el Vórtice influya de forma relevante a futuro, tiene que haber un acoplamiento en toda la columna desde superficie hasta más de 30 km de altitud, además de la época en que ocurra. Ahora, por ser primavera, no se esperan grandes eventos como si hubiera ocurrido en invierno, pero habría benéficos suficientes en México.
Condiciones probables entre marzo y abril
Como se ha comentado, las condiciones meteorológicas serán muy distintas en esta primavera en territorio mexicano por el fenómeno de La Niña y su debilitamiento a fase Neutra, pero ahora se sumaría periódicamente, el colapso del Vórtice Polar. Los modelos sugieren que el acoplamiento inicie en la última semana de marzo y se extienda a gran parte de abril…
Esto implicaría, por un lado, que los anticiclones primaverales no sean tan frecuentes, intensos y extensos en México, permitiendo que los frentes fríos sigan llegando con sus masas polares, activándose con tormentas al encontrarse con calor típico, relieve y una atmósfera inestable, pasando de días de calor a días de frescor con lluvias.
A finales de marzo esto se haría evidente en estados del noreste, centro, oriente y sureste por la interacción de sistemas como frentes fríos, una DANA o vaguada polar, la periferia de un anticiclón y efectos del relieve, calor potencializados por divergencia, generando áreas de tormentas fuertes a severas, granizadas, turbonadas y hasta tornados.
Durante abril, seguiría evidente los periodos de sistemas inestables que generen lluvias y tormentas en dichas regiones, intercaladas con la presencia de anticiclones cálidos, que podría resaltar al inicio del mes con más calor y menos lluvia. Justamente, aunque el escenario indique frescor con lluvias, alguna Ola de Calor será probable en abril y mayo.
¿Qué estados tendrán los mayores efectos con riesgos?
Son altamente probables periodos de lluvias y tormentas en Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, San Luis Potosí, Veracruz, Querétaro, Hidalgo, Puebla, Estado de México, Ciudad de México, Morelos, Tlaxcala, Oaxaca, Tabasco, Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo con cantidades promedio de 20-50 mm y máximos de 100-200 mm en montañas.
Las lluvias serán muy benéficas, pero efectos urbanos negativos diversos son probables. Los estados del noroeste, occidente y sur en el Pacífico podrían tener mínima o nula presencia de lluvia en este periodo. Del norte hacia el Bajío no se descartan eventos ocasionales.