¿Dónde está la ambientalista Irma Galindo Barrios?
México es un país que resalta por sus recursos naturales como playas, selvas y densos bosques, sin embargo, en los últimos años estos se han visto degradados por la sobreexplotación del suelo y una excesiva deforestación. Incluso, quienes defienden a la naturaleza corren un alto riesgo de sobrevivir.
Diversos grupos de mujeres y organizaciones sociales e indígenas, exigen a las dependencias de seguridad pública y derechos humanos, la aparición y búsqueda de varios ambientalistas en México, la mayoría de ellos oriundos de sus regiones.
Han pasado ya 4 meses desde la desaparición de la ambientalista mixteca Irma Galindo Barrios, mujer carismática con gran corazón y defensora ante la desmedida deforestación de la sierra Mixteca de Oaxaca, además de ser una emprendedora de la gestión cultural y ecológica de su comunidad.
Esta defensora era proactiva denunciando las múltiples ocasiones donde se ejercía la tala ilegal y desmesurada del bosque de Atatlahuaca al sur del estado de Oaxaca, fue declarada desaparecida después de un ataque contra ambientalistas indígenas de la región, que fueron desplazados de las tierras que resguardaban, durante la última semana de octubre del 2021.
Mujer de 41 años, gran parte de su vida ha dedicado esfuerzos a cuidar el medio ambiente. Es categóricamente decepcionante que quienes se preocupan por los bosques mexicanos y su diversidad desaparezcan sin dejar rastro alguno, dejando entrever la incapacidad en la seguridad nacional.
Antecedentes de violencia en contra de la ambientalista
Se presume que en ocasiones anteriores ya había sido amenazada por grupos de taladores y representantes municipales. De acuerdo, con varios medios de comunicación que han seguido su historia, el 10 de noviembre del 2019 la habían intentado atacar, un grupo de transgresores enmascarados y con armas, prendieron fuego a su casa y a la de otros defensores del bosque.
En dicha ocasión logró salir con vida, dado que había logrado refugiarse con amigos y familiares ante varias amenazas previas. Las redes sociales como facebook fueron su voz para denunciar tan ruin acto en contra de los ambientalistas.
Última vez que fue vista
Posteriormente siguió adelante con su causa, sin dejarse intimidar, pero el 27 de octubre fue la última vez que la vieron, estaba en Ciudad de México frente al Palacio Nacional solicitando hablar con el presidente Andres Manuel Lopez Obrador, durante una de sus convocatorias matutinas de prensa, pero le negaron el acceso argumentando que no era periodista. Parte de lo que expresó por última vez en facebook fue: "El bosque no se vende, se ama y se defiende. Hasta la victoria siempre", escribió Galindo.
Habitantes de las comunidades indígenas agraviadas señalan al presidente municipal de San Esteban Atatlahuca, Heriberto Nicanor Alvarado y al comisionado Crescenciano Sandoval Quiroz, quienes ejercieron hostigamiento violento en contra de la ambientalista y activistas, acción que los convierte en principales sospechosos de actos como desalojos, secuestros y asesinatos. Hasta el día de hoy no han sido investigados según fuentes informativas.
Violencia ambiental en México
La violencia en contra de activistas en México crece exponencialmente. De acuerdo a las cifras de instituciones como Amnistía Internacional, Global Witness y el Centro Mexicano de Derecho Ambiental, en un informe de 2018, se contabilizaron 108 asesinatos de ambientalistas en una década; de los cuales 85 (66%) eran personas de origen indígena.
Según Amnistía Internacional, hasta septiembre de 2019, 12 personas que se dedicaban al activismo medioambiental y defensa de la tierra habían sido asesinadas en México. De octubre de 2019 a febrero de 2020 hubo 3 asesinatos más. Posteriormente, durante el primer año de gobierno de Andrés Manuel López Obrador, han sido ya 15 activistas asesinados.
La desaparición de Irma Galindo deja ver que en México los defensores del medio ambiente son frecuentemente objeto de amenazas, intimidación, violencia física y en la mayoría de los casos los matan. Mientras tanto, la deforestación continúa en todo el territorio mexicano. Además de que las ayudas gubernamentales para el sector agrario y medioambiental quedan ilícitamente en manos de muchos representantes municipales.