Día Internacional del Aire Limpio para un cielo azul 2023: lema "Juntos por un aire limpio"
El Día Internacional del Aire Limpio para un cielo azul, se conmemora cada 7 de septiembre para reconocer que el aire limpio es importante para tener buena salud y calidad vida.
De acuerdo con el informe publicado por parte de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el tema de 2023, "Juntos por un aire limpio", se centra en la necesidad de reforzar las alianzas, multiplicar las inversiones y compartir la responsabilidad para superar la contaminación del aire.
Derivado del alcance de la polución atmosférica es urgente que asumamos la responsabilidad de cuidar nuestro planeta tanto como individuos y como representantes.
Si unimos esfuerzos más allá de las fronteras, las barreras, los sectores y el trabajo aislado, vamos a contribuir en la reducción de la contaminación del aire, se deben proponer medidas de financiación e inversiones dirigidas a mejorar la calidad del aire y así obtener numerosos beneficios tanto para la salud como en la mejora de calidad de vida.
En este Día Internacional del Aire Limpio por un cielo azul, el principal objetivo es hacer un llamado a todas las partes, desde los gobiernos, las empresas y la sociedad civil, para que trabajemos de la mano en poner fin a la contaminación atmosférica.
Impactos nocivos en humanos y ecosistemas
Las micro y nano partículas de polvo, humo y smog, dan paso a una severa contaminación que penetra profundamente en nuestros pulmones, en el torrente sanguíneo y en el cuerpo.
El ozono troposférico, producido por la interacción de distintos contaminantes con la luz solar, es también una causa de asma y enfermedades respiratorias crónicas que cada vez se vuelven más frecuentes y peligrosas.
Pero, no solo la salud humana resulta deteriorada, también se influye nocivamente en la atmósfera y la madre naturaleza, ya que los contaminantes y partículas suspendidas se encuentran entre los contaminantes relacionados directamente con el calentamiento global a corto plazo.
Principalmente, porque estos pueden persistir en la atmósfera durante unos días o hasta varios decenios, lo que impacta directamente en la flora y fauna que a su vez, se vuelven parte de nuestra sobrevivencia diaria.
Mejoremos nuestra calidad de vida
La contaminación atmosférica es el mayor riesgo ambiental para la salud humana y una de las principales causas evitables de muertes y enfermedades en todo el mundo, responsable de aproximadamente 6,5 millones de muertes prematuras en todo el mundo (en 2016), perdidas que fueron atribuidas a la contaminación atmosférica en interiores y al aire libre.
En los países en desarrollo, este tipo de contaminación afecta de manera desproporcionada a la población más vulnerable que son las mujeres, los niños y los ancianos, y en particular a las poblaciones de bajos ingresos, que a menudo están expuestas a altos niveles de contaminación del aire en interiores y en espacios abiertos resultante de los métodos de cocina o calefacción que utilizan leña y queroseno.
La contaminación atmosférica es un problema mundial que tiene repercusiones de largo alcance debido a su vasta propagación, y porque, si no se produce una intervención agresiva, el número de muertes causadas por la contaminación del aire en espacios abiertos va camino de aumentar en más de un 50 % antes de 2050.
Como sociedad tenemos que soportar los elevados costos de esta contaminación ya que tiene impacto negativo sobre la economía, la productividad laboral, los costos de atención sanitaria y el turismo, entre otros.
La mala calidad del aire plantea un problema en el contexto del desarrollo sostenible para todos los países, en particular en las ciudades y las zonas urbanas de los países en desarrollo, donde los niveles de contaminación atmosférica son superiores a los límites establecidos en las directrices sobre calidad del aire de la Organización Mundial de la Salud.
La comunidad internacional es muy consciente en la actualidad que la mejora de la calidad del aire puede ayudar a reducir las consecuencias del cambio climático y que las medidas de mitigación pueden mejorar la calidad del aire.