Desde octubre, ciclón tropical, tras ciclón tropical
Sin duda, la temporada 2020 ha sido de las más activas de las que se tiene registro, la Organización Meteorológica Mundial ha realizado una reflexión al respecto la cual compartimos contigo en esta publicación.
El pasado miércoles 18 de noviembre, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) ha publicado un comunicado denominado Successive tropical cyclones cause devastation, en español: los sucesivos ciclones tropicales causan devastación.
En éste se menciona que durante la temporada de ciclones tropicales 2020 han sido millones de personas en Centroamérica y partes del sudeste asiático las que han experimentado fuertemente los riesgos y peligros asociados a esta clase de fenómenos, que comprometen la vida, la propiedad y el bienestar socioeconómico se asocian a esta clase de fenómenos meteorológicos.
Una temporada sumamente activa
Hace unos días, la formación de Iota generó un récord de tormentas con nombre en el Océano Atlántico, convirtiéndose en la trigésima de esta temporada, además es importante resaltar que junto con Eta fueron dos formaciones importantes de huracanes para un mes noviembre, cuando usualmente va terminando el periodo ciclónico. Otro dato de esta temporada es el registro de cuatro huracanes mayores, correspondientes a Delta, Epsilon, Eta y Iota.
Ante esta situación, la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (UNOCHA) ha advertido sobre las consecuencias potencialmente catastróficas de no actuar en la recuperación de Guatemala, Honduras y Nicaragua, tras la sucesión de Eta y Iota, por lo que ya ha lanzado múltiples llamadas internacionales de asistencia al respecto.
¿Qué ha sucedido en el otro lado del mundo?
Mientras tanto, en el Océano Pacífico Norte Occidental y el Mar de China Meridional, ha habido 22 tormentas con nombre en lo que va de temporada, incluidos diez tifones. Esto incluye tres en la categoría 3 de intensidad equivalente, tres en la 4 y uno en la 5.
El tifón más intenso ha sido Goni (Rolly) que ingresó a tierra en Filipinas el 1 de noviembre como el más poderoso que tocó tierra en 2020 e incluso uno de los ciclones tropicales más poderosos registrados en la historia, por lo que se le relacionó con Haiyan (Yolanda, 2013).
Desde octubre son más de 2 millones de personas en Filipinas, Vietnam y Camboya necesitan asistencia urgente, de acuerdo con UNOCHA. Lo anterior, ante un panorama de casas dañadas o destruidas tras las inundaciones, tormentas, vientos de alta velocidad, deslizamientos de tierra y corrientes de lodo volcánico. Además, las instalaciones sanitarias, los sistemas de agua y saneamiento y las escuelas han sufrido daños, de igual forma han sido impactos los cultivos y el ganado, entre otras fuentes de sustento de la población.
Ante esta situación y el pronóstico de una posible extensión de la temporada ciclónica, queda en visto la necesidad de cooperación mundial para un mejor manejo de los pronósticos y avisos meteorológicos. Por ello, te recomendamos siempre estar pendientes a las alertas tempranas que se emiten vía Metored.