Corriente Circumpolar Antártica: ¿Podría frenarse la corriente oceánica más fuerte del planeta?
Los científicos han modelado cómo el derretimiento de las capas de hielo podría frenar la corriente oceánica más fuerte del planeta, la Corriente Circumpolar Antártica. Una posibilidad que no augura nada bueno si se concreta, ya que aceleraría el calentamiento global.

Calentamiento global, acelerado por el derretimiento del hielo. Un equipo de científicos, formado por investigadores noruegos, indios y australianos, estudia actualmente este hecho científico, que ya es conocido, pero no sólo eso. Estos últimos, equipados con una de las supercomputadoras más potentes de Australia, pudieron modelar cómo el derretimiento de la capa de hielo podría cambiar una corriente antártica, llamada corriente circumpolar.
La investigación, publicada el lunes 3 de marzo en la revista científica Environmental Research Letters, es preocupante.
Es la corriente oceánica más fuerte del planeta
Si la Corriente Circumpolar Antártica se debilitara, las consecuencias para el planeta podrían ser desastrosas. “Si este motor actual falla, las consecuencias podrían ser graves, incluyendo una mayor variabilidad climática, con más extremos en algunas regiones, y un calentamiento global acelerado debido a una reducción en la capacidad del océano para actuar como sumidero de carbono”, dijo Bishakhdatta Gayen, científica de la Universidad de Melbourne y coautora del estudio.
Cinco veces más potente que la Corriente del Golfo
El científico describe el papel de la Corriente Circumpolar Antártica como una "cinta transportadora" cuyo propósito es mover gigantescas columnas de agua e interconectar los océanos Atlántico, Pacífico e Índico.
El problema es que el derretimiento del hielo podría liberar enormes cantidades de agua dulce y, en consecuencia, el contenido de sal cambiaría. La circulación del agua fría entre las profundidades y la superficie se haría más compleja. Sin embargo, las aguas frías son capaces de absorber más calor de la atmósfera.
Con una desaceleración de la intensidad de la Corriente Circumpolar Antártica, los moluscos y las algas podrían eventualmente establecerse y colonizar la Antártida. Resultado: se alteraría el equilibrio alimentario y se modificarían las actividades pesqueras. Lo que impactaría directamente a las comunidades aledañas. En resumen, un efecto mariposa evidente y peligroso.

Taimoor Sohail, científico del clima y coautor del estudio, afirma que “el Acuerdo de París de 2015 tenía como objetivo limitar el calentamiento global a 1.5 grados Celsius por encima de los niveles preindustriales”, y agrega que “muchos científicos coinciden en que ya hemos alcanzado ese objetivo de 1.5 grados y es probable que la temperatura aumente, con efectos colaterales en el derretimiento del hielo antártico”.
Sin embargo, los investigadores siguen siendo cautelosos ante esta posibilidad. Para ellos, se trata de una “región pobremente observada” y se necesitan más estudios para verificar este posible fenómeno. A esto se suma el hecho de que este estudio contradice estudios anteriores que habían demostrado una aceleración de la corriente.