Colombia padece con las recientes inundaciones
Más de 150 familias resultaron afectadas a consecuencia de las lluvias que han dejado inundaciones en Bojayá, Chocó Colombia, manteniendo en estado de emergencia e incomunicada a la población por la creciente de los ríos.
El pasado dos de abril se registraron intensas precipitaciones que ocasionaron severas inundaciones en el territorio de Bojayá, Chocó Colombia. Los medios de comunicación de la localidad reportaron que las casas de aproximadamente 580 habitantes, estimando en 150 familias, quedaron bajo el agua dejando diversos daños sin cuantificar.
El alcalde de Bojayá, Edilfredo Machado, declaró que familias de la demarcación territorial de Pogué y de la comunidad indígena de Santa Lucía, tuvieron que dejar sus casas por la gran acumulación de agua. Recalcó que el pasado jueves más de 70 familias de Pogué, y otras 80 de la comunidad indígena de Santa Lucía, se encontraban damnificados por el evento meteorológico.
A consecuencia de la importante creciente de los ríos, los habitantes de estas comunidades colombianas se encontraban en estado de emergencia e incomunicados. Se informó que los pobladores tuvieron que desplazarse a una parte alta de las localidades, pues no tenían otro lugar a donde acudir para resguardarse hasta que descendiera el nivel del agua.
Los habitantes pidieron ayuda a las autoridades locales y de la nación para ser trasladados a otro sitio, en donde no se generen riesgos por inundaciones o por los riesgos de inseguridad que padecen, al ser confinados por grupos armados que operan en esa zona del país sudamericano.
Las redes sociales evidenciaron el hecho
Leyner Palacios, líder social de la demarcación de Chocó en Colombia, informó por medio de redes socialessobre el peligro que corría la gente ante la creciente en el caudal de los ríos. Medios locales informaron que una comisión de gestión de riesgos se había desplazado hasta Bojayá a fin de realizar el censo de damnificados y facilitar las acciones de ayuda.
Pobladores de esas comunidades dijeron sentirse preocupados, pues la gente ha tenido que esperar durante varios años para recibir el apoyo del gobierno colombiano, con la finalidad de ser reubicados hacia zonas más seguras en donde no pongan en peligro sus vidas, ni en riesgo sus viviendas y patrimonio que con esfuerzo han conseguido.