Calendario del huerto: que plantar en noviembre y cuáles son las tareas del mes

Noviembre llega con su aire fresco, ambiente frio y con días más cortos, anunciando que el huerto necesita algunos ajustes para lograr adaptarse a esta época de otoño.

Noviembre es el momento ideal para sembrar hortalizas de ciclo corto y resistente al frío, permitiéndote aprovechar al máximo el cambio de temporada.

En el hemisferio norte, y especialmente en México, este mes es perfecto para sembrar ciertos cultivos y realizar tareas esenciales que asegurarán la salud y productividad de nuestras plantas. Si bien las temperaturas van en descenso, todavía hay muchas cosas que podemos hacer para aprovechar al máximo el huerto en esta transición al invierno.

Las opciones para sembrar en noviembre se vuelven limitadas debido a las condiciones de la temperatura ambiental. Sin embargo aun existen opciones viables, especialmente si hablamos de hortalizas y cultivos de raíz, que se benefician del clima fresco y se desarrollan bien sin mucho calor.

Hortalizas recomendadas para sembrar

Aprovecha que noviembre es un excelente mes para plantar hortalizas de hoja. Vegetales como espinacas, acelgas y lechugas son ideales para estas temperaturas frescas, pues no requieren mucho calor para crecer. Además, si se les da el cuidado adecuado, estarán listas para cosechar en pocas semanas, permitiéndote disfrutar de ensaladas frescas y nutritivas antes de que llegue el verdadero frío.

Los rábanos son uno de los cultivos más rápidos y perfectos para noviembre; puedes empezar a cosecharlos en solo 3-4 semanas después de sembrarlos

Otra opción interesante en noviembre son las hortalizas de raíz. Rábanos, zanahorias y nabos encuentran en este clima las condiciones ideales para desarrollarse. Estos cultivos son bastante resistentes al frío y ayudan a mejorar la estructura del. O o suelo. Plantarlos ahora es ideal para tener una cosecha en los primeros meses del próximo año, cuando otras plantas estarán en descanso.

El betabel es una excelente opción para sembrar en noviembre, ya que se adapta bien al clima fresco y, con cuidados básicos, te dará una cosecha rica en nutrientes y color en solo unos meses.

Noviembre es el mes en el que muchos jardineros urbanos aprovechan para sembrar ajo y cebolla, dos cultivos que no temen al frío y que, con paciencia, estarán listos para la cosecha en primavera. Estos cultivos de ciclo largo son perfectos para esta temporada, ya que aprovechan los meses de frío para desarrollar raíces fuertes.

Tareas importantes a realizar en este mes

A medida que el clima se vuelve más fresco, también es momento de enfocarnos en el cuidado del suelo. Las lluvias pueden haber compactado la tierra, así que removerla suavemente y agregarle compost o abono orgánico ayudará a mantenerla suelta y rica en nutrientes. Esto beneficiará a las plantas que están creciendo y también preparará el terreno para los cultivos de la siguiente temporada.

El acolchado contribuye a reducir la aparición de malezas, lo cual nos ahorra trabajo extra en el huerto.

En cuanto a tareas de mantenimiento, noviembre es perfecto para limpiar el huerto. Retirar restos de plantas marchitas o enfermas es fundamental para evitar plagas y enfermedades que puedan invernar y complicarnos en los próximos meses. Además, puedes aprovechar esta limpieza para revisar el estado de tus herramientas, afilarlas y desinfectarlas, ya que estarán en constante uso durante los días de trabajo en el huerto.

En esta época, el riego debe reducirse, ya que el suelo retiene más humedad debido al clima frío. Riega solo cuando sea necesario para evitar que el suelo se compacte o se encharque

También es buena idea dedicar tiempo a la protección contra el frío. Si tienes plantas sensibles como tomates o pimientos que aún están produciendo, podrías cubrirlas con una manta térmica o un plástico protector. Estos elementos pueden ayudar a alargar su temporada de producción un poco más antes de que las heladas se instalen definitivamente.

Este mes es un buen momento para empezar un pequeño compostaje casero, si aún no tienes uno. Las hojas secas que caen en abundancia en esta temporada son ideales para el compostaje, junto con restos de cocina como cáscaras de frutas y verduras. Al compostar, generas tu propio abono orgánico para nutrir el huerto y reduces tus desechos orgánicos.

Si tienes espacio en tu huerto, considera agregar algunas plantas aromáticas perennes, como romero, salvia o tomillo. Estas hierbas aportan sabor a la cocina, son resistentes y ayudan a mantener a raya ciertas plagas en el huerto. Plantarlas en noviembre les da la oportunidad de adaptarse bien antes del invierno y estarán listas para usarse todo el año.

Noviembre también nos invita a disfrutar del proceso. Pasar tiempo en el huerto en estos días frescos es una experiencia especial. Si bien hay tareas por hacer, este es un mes perfecto para valorar el esfuerzo del año y visualizar lo que quieres lograr en el siguiente ciclo. Mantén tus manos en la tierra y sigue cultivando, ¡el huerto siempre tiene algo que enseñarnos!